El Gobierno nacional decomisó 430 toneladas de carne vacuna para exportación, por un valor superior a los 2 millones de dólares. La mercadería decomisada se destinará a comedores comunitarios.
El secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Juan José Bahillo, junto al director general de Aduanas, Guillermo Michel, anunciaron ayer el decomiso de 430 toneladas de carne vacuna congeladas preparada para la exportación de una empresa apócrifa, que serán destinadas a fines sociales útiles, a través de iglesias que asisten a numerosos comedores.
El motivo del accionar atendió a que la empresa no brindó información para poder determinar la trazabilidad de la mercadería intervenida y como consecuencia, la propiedad y origen de esta; como tampoco pudo consignar el ingreso de divisas al país.
“Es el decomiso más grande que se tiene memoria, son 18.050 cajas de 25 kilos cada una, un equivalente a 2.100.000 raciones”, dijo Bahillo desde la planta, ubicada en la localidad bonaerense de Villa Udaondo, al tiempo que destacó el trabajo de la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios, a cargo de Luciano Zarich, en lo que hace al control de la legalidad de las matrículas a través del Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial (RUCA).
Previa verificación del estado higiénico-sanitario por parte del servicio de inspección veterinaria habilitado, el Senasa, la mercadería será entregada a iglesias que colaboran con numerosos comedores comunitarios para cumplir fines sociales útiles.
En este sentido, Bahillo enfatizó: “Tengamos en cuenta que el decomiso se hace por cuestiones comerciales y el no ingreso de divisas de la exportadora, la carne en términos sanitarios es totalmente apta para el consumo por lo que a partir de ahora vamos a iniciar una distribución a partir de la Iglesia Católica, con comedores comunitarios para que pueda ser asignada a un fin social”.
Por su parte, el titular de Aduana señaló: “Lo que buscamos es desalentar este tipo de maniobras y que los dólares que sean destinados a producción y al trabajo argentino y no para especulaciones financieras”.
“Se trata de una empresa que no tenía capacidad económica, que pretendía exportar carne al exterior, particularmente a China. Y la maniobra que estaba realizando era no liquidar las divisas, dejar los dólares en el exterior para aprovechar la brecha cambiaria y liquidarlos a valor del dólar financiero, del dólar blue”, amplió Michel.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación informó que la investigación continúa con todos aquellos actores que comercializaron con esta empresa apócrifa.