El Senasa, Inase y la ASA implementan acciones conjuntas en la lucha contra el virus rugoso del tomate o ToBRFV.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y el Instituto Nacional de Semillas (Inase) llevaron a cabo un encuentro con la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA) y representantes de distintas empresas importadoras de semillas para dialogar sobre la problemática del virus rugoso del tomate o ToBRFV (sigla por su nombre en inglés, Tomato brown rugose fruit virus), una nueva virosis, que daña cultivos de tomate y pimiento.
La apertura estuvo a cargo del director nacional de Protección Vegetal del Senasa, Diego Quiroga, quien resaltó: “Es muy importante concretar este encuentro público-privado para trazar estrategias comunes y trabajar coordinadamente en la prevención de este virus”.
Además, estuvieron presentes por el Inase, su presidenta, Silvana Babbit y el director de Fiscalización, Mariano Petruzela; junto a los equipos técnicos del Senasa, y en representación de ASA, Juan Erdmann.
“Una de las particularidades de este virus es que se transmite por semilla y sabemos que el movimiento de material de propagación es el mecanismo más eficiente de dispersión de las plagas; por lo tanto, el trabajo junto con los importadores es fundamental para ajustar el control sobre los flujos de movimiento de semillas entre operadores de la actividad, ya que nos permite establecer herramientas de prevención y contención más eficaces”, explicó Babbit.
Durante el encuentro se abordó el estado de situación del virus en nuestro país, los antecedentes y acciones realizadas en el marco de la alerta fitosanitaria, dispuesta por el Senasa a través de la Resolución N° 569/2023. En ese sentido, se mencionó la importancia de la participación del sector privado en el Comité de Crisis creado por la resolución. Tanto el sector público como el privado se comprometieron a trabajar en forma conjunta y articulada para reforzar las actividades de prevención.
Para más información respecto de la plaga acceder al Micrositio. Ante sospechas de presencia de la enfermedad, es fundamental no tocar la planta, aislar el sector y avisar a la oficina del Senasa, Inase o INTA más cercana a su localidad.
