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Uvas sin semilla del INTA a prueba en Australia

La colaboración entre el INTA y una empresa australiana busca evaluar la adaptación de la variedad Serena INTA a las condiciones locales, potenciando la exportación de innovaciones argentinas.

El INTA ha desarrollado nueve variedades de uva de mesa sin semilla en el marco de su programa de mejoramiento genético en la región de Cuyo. Una de estas variedades será aprovechada por una empresa australiana que ya está probando su adaptación a las condiciones locales.

El programa de mejoramiento genético comenzó en 1995 con el objetivo de obtener uvas sin semillas para consumo en fresco, permitiendo así a Argentina competir a nivel internacional. Tras casi 30 años de ensayos en campo y en laboratorio, el INTA logró inscribir nueve variedades en el Registro Nacional de Cultivares de Argentina. Estas variedades incluyen tres blancas (Esperanza INTA, Resistencia INTA y Grandeza INTA), tres negras (Fernandina INTA, Revelación INTA y Sorpresa INTA), dos rojas (Serena INTA y Marisela INTA) y una rosada (Delicia INTA).

Las parcelas demostrativas del INTA, ubicadas en sus Estaciones Experimentales Agropecuarias de San Juan, Mendoza y Junín, son visitadas por productores, exportadores y técnicos nacionales e internacionales interesados en conocer las características del cultivo y la calidad de los racimos. Además, se brinda apoyo a los productores locales que ya cultivan las variedades INTA, con el objetivo de mejorar las prácticas de manejo y optimizar el cultivo, para facilitar la inserción de estas variedades en los mercados comerciales.

En 2018 y 2019, un grupo de productores australianos visitó Argentina con el interés de obtener plantas de Serena INTA. A finales de 2020, se firmó un acuerdo de evaluación, seguridad y exclusividad con la empresa Louis Melbourne. Tras el periodo de pandemia, en enero de 2023, las estacas de la variedad Serena INTA fueron enviadas a Australia, donde actualmente se encuentran plantadas a la espera de la cosecha, para evaluar su adaptación a las condiciones edafoclimáticas de la región.

Hasta el momento, la empresa ha iniciado el cultivo de Serena INTA en Robinvale, en el estado de Victoria. En el futuro, planean expandir el cultivo a Queensland, un estado con clima subtropical, lo que permitiría adelantar la cosecha en 2 a 3 meses respecto a Victoria.

En paralelo a la inclusión de las variedades INTA en el mercado nacional e internacional, un equipo constituido por especialistas de distintas Estaciones Experimentales del INTA, de Mendoza y San Juan, continúa evaluando preselecciones con el propósito de contar con nuevas variedades inscriptas. Asimismo, se realizan investigaciones sobre el potencial que tienen estas uvas de mesa sin semilla para la obtención de productos con valor agregado como pasas, jugos de uva, bebidas fermentadas, entre otros.

Créditos: María Isabel Quiroga – Santiago Centeno