En el predio de Palermo se presenta la feria “Corazones Abiertos”, donde ONGs y fundaciones exhiben su compromiso con distintas comunidades, creando “puentes” para que los visitantes se sumen a colaborar con sus proyectos.
El Alfarcito es una escuela secundaria de montaña a la que asisten alumnos que han terminado el nivel primario en escuelas plurigrado ubicados en 25 comunidades, caseríos, de la zona de San Antonio de los Cobres y Quebrada del Toro, a algunas de las cuales actualmente no se puede acceder con vehículos. La obra fue creada por el Pbro. Sigfrido Maximiliano Moroder -Padre Chifri-, y hoy la continua un grupo de laicos.
“Estamos a 80 kilómetros de Salta y las comunidades de las que vienen nuestros chicos están entre 1500 y 4000 metros de altura”, dijo Milagros Aguerre, a cargo de Desarrollo Institucional y Apertura Comunitaria, para los proyectos extracurriculares. Comentó que hay niños que caminan más de 10 horas para llegar a la Escuela, donde permanecen durante toda la semana.
El Padre Chifri fue a misionar a esa zona en 1999, y las condiciones que observó lo inspiraron en su acción. El inicio fue con artesanos y, con el correr del tiempo, impulsó una cooperativa de productores de papines andinos; mientras en el ínterin se gestaba la escuela secundaria de montaña. “Lo primero era promover la cultura del trabajo, y revalorizar toda esa riqueza que ellos tienen”, reseñó Aguerre.
El secundario de montaña favorece el arraigo y la igualdad de oportunidades para los jóvenes que eligen quedarse en el cerro. Más información en: www.colegioalfarcito.edu.ar