El convenio busca proteger la salud vegetal, animal, ambiental y reforzar el estatus fitosanitario con 14 puestos de control, haciendo énfasis en la prevención del HLB.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) renovó el convenio de asistencia sanitaria con la Asociación Fitosanitaria del Noroeste Argentino (Afinoa) que da continuidad a la ejecución de acciones de control sanitario y de inocuidad conjuntos, en mercancías que ingresan y transitan en el noroeste argentino, en especial productos de origen vegetal.
En el acto, celebrado en la sede central del Senasa, suscribieron el convenio la presidenta del organismo estatal nacional, Diana Guillén y el presidente de Afinoa, Pablo Padilla. También estuvieron presentes, por el Senasa su directora de Sanidad Vegetal, Wilda Ramírez y su coordinador general de Fronteras y Barreras Sanitarias, Juan Pablo Giménez.
En la oportunidad Guillén resaltó que “la renovación de este acuerdo es ratificar el compromiso de trabajo conjunto” entre Senasa y Afinoa “en el área protegida de HLB con actividades de fiscalización en ruta”.
En tanto Giménez explicó que el trabajo se lleva a cabo con “catorce puestos de control, patrullas móviles y tecnología inteligente de control con el fin de sostener el estatus fitosanitario de la región con respecto a cítricos”.
Por su parte Padilla sostuvo que “siempre es importante para el sector citrícola del norte argentino renovar este convenio para una actividad que venimos llevando adelante desde hace varios años con el Senasa” y afirmó que “para nuestro sector es clave el trabajo coordinado con Senasa y las provincias en el manejo de las barreras fitosanitarias en el NOA para evitar el ingreso de enfermedades, proteger nuestras producciones y sostener los estatus fitosanitarios”.
Asimismo, el Senasa capacitará al personal destinado a realizar las tareas de control asignadas a Afinoa y verificará el cumplimiento del Plan Operativo de Trabajo.
El trabajo conjunto de estas instituciones permite dotar de mayor eficiencia a la vigilancia fitosanitaria y el control de la inocuidad en los productos agroalimentarios que circulen por el noroeste argentino y contribuye a reforzar el cuidado la salud pública, animal, vegetal y ambiental.