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Semana de la Miel: un panorama de la producción salteña

Con diversas actividades, entre el 16 y el 20 de mayo, la Semana de la Miel busca visibilizar el trabajo de pequeños productores y promover la articulación entre la provincia, cooperativas y productores.

Como cada 20 de mayo, se celebra el Día Mundial de las Abejas en conmemoración del nacimiento de Anton Janša, apicultor esloveno del siglo XVIII, pionero en la aplicación de técnicas modernas en la apicultura.

En nuestra provincia, se aprovecha la ocasión para visibilizar la actividad a través de la Semana de la Miel, que se desarrolla del 16 al 20 de mayo. La iniciativa cuenta con el apoyo del Gobierno de Salta y de la Mesa Apícola Provincial -conformada por diversas cooperativas-, con el objetivo de fortalecer la producción y fomentar la integración de productores e inversores en el sector apícola.

“Salta representa apenas el 5% de la producción nacional. Esto no es negativo, ya que competimos con regiones muy desarrolladas, pero aún seguimos siendo pequeños en comparación con otras provincias. Cabe destacar que, a nivel nacional, Argentina es el segundo exportador mundial de miel, en donde el 90% se exporta y solo entre el 5% y el 10% se consume internamente. Actualmente, el consumo es de apenas 300 gramos por habitante al año, lo cual es realmente bajo. Por eso, la idea es fortalecer el NOA para atraer productores e inversores, y aprovechar la floración única de Salta, que tiene un gran potencial para incrementar la producción”, señaló Gastón Larrán, presidente de la Mesa Apícola de Salta.

En términos productivos, la capacidad de las colmenas en Salta es muy alta. El promedio por productor es de 30 colmenas, aunque existen entre cuatro y cinco apicultores que superan las 500, mientras que la mayoría se compone de pequeños productores. Esta situación evidencia un gran potencial de crecimiento, especialmente si se implementan estrategias adecuadas.

Debido a la complejidad que implica mantener un apiario, muchos de estos pequeños productores no viven exclusivamente de la apicultura, sino que la combinan con otras actividades agrícolas. Actualmente, son pocos los que calculan formalmente los costos de producción de miel. “Se ha mencionado, por ejemplo, que con 260 colmenas un productor puede cubrir sus costos y comenzar a generar ganancias. Sin embargo, en la práctica, la producción se maneja de forma muy informal, a través de ferias y ventas en pequeños comercios”, explicó Larrán.

Según detalló el presidente de la Mesa Apícola, en Salta hay unos 250 productores formalmente inscriptos, mientras que otros 250 aún no han regularizado su actividad. “Aproximadamente la mitad de la producción se comercializa de forma informal, ya que el 99% de los productores vende sin registrarse oficialmente”, añadió.

Por ello, la Provincia y la Mesa Apícola trabajan en conjunto para avanzar en la formalización de los productores y lograr que su miel obtenga la certificación de “Denominación de Origen”, otorgada por la Secretaría de Agricultura de la Nación. “Un pequeño campo que hoy vende miel a 6.000 pesos el medio kilo, gracias a esa certificación podría aumentar su precio de venta a 10.000 o incluso 12.000 pesos”, ejemplificó Larrán.

Desafíos para potenciar la producción en Salta

“El año pasado organizamos una reunión con productores de Salta, Jujuy y Tucumán, y el interés fue generalizado, especialmente gracias al apoyo del Gobierno, a través de la Secretaría de Agricultura. El objetivo es identificar qué se necesita: ¿capacitación? Se busca ofrecerla. ¿Inversores? Hay que trabajar en atraerlos”, explicó Larrán.

Además, destacó que producir miel no requiere contar con un campo propio. “Se puede trabajar en terrenos alquilados o aprovechar zonas fiscales de la provincia. Por ejemplo, en una reunión con Salta Forestal, propuse que la Mesa Apícola incluya como objetivo la introducción de colmenas en esos terrenos. Buscamos que cualquier persona interesada en la apicultura puede encontrar oportunidades, incluso sin tierras propias”, añadió y mencionó que, si bien actualmente existen dos salas de extracción, se necesitan al menos cinco más debidamente habilitadas.

A esto se suma la necesidad de contar con una ley apícola provincial, ya que Salta aún no dispone de una normativa específica para el sector. “El proyecto ya está redactado, solo resta tomar la decisión de presentarlo en la Cámara de Diputados y avanzar en su aprobación”.

La apicultura salteña en números

Consultado sobre cuánto debería producir la provincia para contar con un sector apícola más sólido y capaz de abastecer mejor el mercado local, Larrán destacó que el potencial está, pero sería necesario triplicar la producción actual. “Hoy estamos en aproximadamente 100.000 kilos al año, pero para abastecer el mercado local de manera estable deberíamos superar los 300.000 kilos”, explicó.

“Uno de los principales desafíos es el crecimiento de las colmenas. Pasar de 30 a 60 colmenas es relativamente sencillo, pero el verdadero punto de inflexión llega cuando hay que escalar de 100 a 200 colmenas o más. Ahí es donde muchos productores enfrentan dificultades”, detalló.

Además, señaló otros factores que afectan la producción, como los problemas sanitarios (varroa), la falta de capacitación y las floraciones cortas. Otro inconveniente es la alta enjambrazón de las colmenas: cuando las abejas perciben escasez de alimento, abandonan la colmena, lo que hace crucial apoyarlas en esos momentos críticos.

Por último, explicó que el costo aproximado de una colmena completa -con cámara de cría de 10 marcos y una reina, lista para producir- oscila entre 100.000 y 150.000 pesos. En cambio, el precio de un núcleo ronda entre 50.000 y 70.000 pesos, ya que representa la mitad de una colmena.

“La diferencia entre ambos es que una colmena completa ya está en producción y comienza a generar miel; mientras que un núcleo necesita tiempo para desarrollarse. Primero debe alcanzar el tamaño adecuado en la cámara de cría y, recién entonces, se puede agregar el alza melaria. A veces, esas demoras hacen que el productor pierda una floración clave para su producción”, concluyó.