El flamante presidente de la Sociedad Rural Salteña, Joaquín Elizalde, se refirió al potencial productivo de la provincia y la región.
El flamante presidente de la Sociedad Rural Salteña, Joaquín Elizalde, se refirió a los objetivos de la entidad para los próximos años y al potencial productivo de la provincia y la región.
En una entrevista con el diario El Tribuno, el ruralista aseguró que “se puede duplicar el stock bovino”. “No quiero bajar los brazos en lo que es el Ordenamiento Territorial, porque creo que Salta tiene un potencial muy grande. Estoy convencido de que Salta puede duplicar su stock bovino, pasar de 1 millón a 2 millones de cabezas. Obviamente siempre haciendo las cosas con responsabilidad” enfatizó.
¿Cómo le gustaría encarar su gestión?
Uno de los principales temas que queremos trabajar es en comunicación. Creo que el sector tiene una gran falencia desde hace muchos años en lo que es comunicación interna. Hoy la demanda de los socios no es la misma que hace muchos años, así que tenemos que tratar de llegar de otra manera.
Después obviamente la comunicación hacia afuera. Seguramente vamos a ir trabajando sobre las coyunturas que vayan surgiendo. La sequía fue un problema grave y después las gestiones que se hicieron para la emergencia agropecuaria son temas coyunturales que, obviamente, hay que tratarlas, pero no dejan de ser del momento. También nos gustaría trabajar en una Ley de Emergencia, tanto provincial como nacional. Creemos que deberían ser cosas más automáticas y no tendrían que necesitar tanta burocracia. A raíz de eso estamos trabajando con Prograno para que salga por ley un seguro multirriesgo para el sector. Es un seguro que lo recaudaría Rentas, pero iría a una cuenta distinta que le queda al productor para que esto se dispare automáticamente ante los imprevistos. No está definido, pero estamos trabajando en eso.
¿En la parte de producción?
No quiero bajar los brazos en lo que es el Ordenamiento Territorial, porque creo que Salta tiene un potencial muy grande. Estoy convencido de que Salta puede duplicar su stock bovino, pasar de 1 millón a 2 millones de cabezas. Obviamente siempre haciendo las cosas con responsabilidad. Imaginate que duplicar el stock bobino para Salta sería una fuente de ingresos y de trabajo muy importante y, obviamente, ni hablar si sembramos por lo menos un 20% o 30% más de lo que sembramos hoy en cualquier producción.
¿Qué lugares les gustaría revisar de las zonas que están protegidas?
Yo creo que Anta todavía tiene para desarrollarse, San Martín, Orán y Rivadavia son otros departamentos que perfectamente pueden crecer. Te doy un ejemplo: podríamos tener 4 empresas como Salvita o como Abra del Sol. Me parece que el gobierno tiene que tener la responsabilidad de incentivar a la producción. Salta sembraba 600 mil hectáreas de soja y hoy siembra 400 mil. En esas 200 mil obviamente que creció el maíz y otros cultivos, pero también es porque no hay incentivo para que se siembre. A mí me parece que es un tema que no me gustaría dejar de lado lo que es desarrollo. Industria frigorífica nos falta, tenemos cualquier cantidad de cabezas que se van a faenar a otras provincias y vuelven como carne enfriada.
¿Cómo impactó la sequía en el productor local este año?
De alguna manera, Salta sufrió menos que el resto de las provincias. Obviamente que nos afectó mucho la sequía, hubo sectores que sufrieron más que otros. La ganadería fue de las más afectadas, te diría. La citrícola y la agricultura también, pero va a haber producción y yo creo que la recuperación va a ser dentro de un año, cuando empiece el verano que viene. Nosotros en Salta no tenemos la segunda oportunidad que pueden tener en el sur, como con el trigo, tenemos que esperar un año para volver a sembrar. Nuestra campaña de invierno es muy pobre, casi que no se tiene en cuenta. No hay humedad para sembrar en el invierno, entonces la recuperación va a ser de acá a un año, cuando tengamos un buen verano de nuevo y una buena campaña agrícola.
Si la recuperación va a ser dentro de un año y recién estamos en mayo faltarían 7 meses largos, ¿cómo van a afrontar este tiempo?
Estamos empezando a cosechar, por suerte hay cosecha, va a haber producción, vamos a cosechar un 30% o 40% menos de lo que deberíamos cosechar. Cuando hablo de cosecha hablo de maíz, soja, porotos, sésamo, algodón, los cultivos extensivos. Es muy probable que haya menos actividad económica, creo que el gobierno va a tener que trabajar también en incentivos para fomentar un poco la maquinaria agrícola, las inversiones y capital de trabajo para volver a sembrar. Desde que termina la cosecha en julio hasta diciembre van a ser unos cinco o seis meses largos, hasta volver a sembrar, hasta que vuelva a llover, volver a sembrar y volver a generar la expectativa.
Menos rendimiento y cosecha significan menos ingresos para el productor, ¿van a necesitar créditos para poder afrontar la nueva campaña?
En general te diría que la mayoría de los productores medianos a chicos van a necesitar créditos blandos para capital de trabajo. En general, la agricultura normalmente financia todos los insumos. O sea que las empresas comerciales van a tener que financiar los insumos a cosecha con el costo que eso significa. Pero yo quiero recalcar que cuando se habla de menos producción y menos cosecha que afecta directamente al productor pero que es menos actividad económica para el resto de los pueblos del interior. Imagínate que es menos contratistas, menos ingresos, menos camioneros, menos ingresos de los comercios que están en el pueblo. Esos pueblos dependen mucho de la producción y toda la actividad que se derrama va a ser menor.
Hay una red muy grande de proveedores y de trabajo indirecto que viven alrededor del campo ¿no?
Exactamente. Te doy el ejemplo de Las Lajitas que es el que más conozco. Es un pueblo que vive netamente de la actividad agropecuaria. Si no es directamente, es por los comercios que están ahí. Son pueblos y comunidades que giran alrededor de la actividad y es probable que se note una menor actividad económica.
¿Hay buenas expectativas para el año que viene?
Obviamente que se habla de que se terminó “La Niña” y empieza el fenómeno de “El Niño” a partir de septiembre, pero yo creo que la expectativa va a pasar mucho por lo político, por el cambio de gobierno nacional, de un tipo que quiera volver a invertir sabiendo que va a venir otro gobierno. El sector agropecuario depende entre un 70% y 80% de las políticas nacionales, o sea que mientras haya un cambio de gobierno y mejores expectativas de negocio o de reglas claras el productor va a poder sembrar y va a sembrar más y mejor.
Lo que pide el productor es que la política no sea un freno…
Yo soy de la idea de que mientras menos se meta del Estado mucho mejor para los productores. El productor agropecuario sabe que las inclemencias del clima son parte de las reglas del juego, pero lo que no forma parte es el entrometimiento permanente del Estado y el cambio de reglas. Mientras más libre puedas trabajar y más certezas tengas, mejor va a ser para todos.
Fuente: El Tribuno