Estamos viviendo la 4ª Revolución Industrial, que no sólo transformó los métodos de producción en las fábricas, sino también modificó los procesos en la agroindustria, dando lugar a la Agricultura 4.0.
Entender lo que es la Agricultura 4.0, es esencial para aquellos que desean expandir su labor de una manera más rentable y sostenible. Al fin y al cabo, el concepto se basa en la agricultura digital para optimizar la cadena de producción en su totalidad.
Así que, si quieres estar al tanto del futuro de la agroindustria, echa un vistazo al contenido a continuación y descubre sobre las ventajas de la agricultura 4.0 y por qué el agricultor debe considerar su implementación.
¿Qué es la Agricultura 4.0?
Llamamos Agricultura 4.0 a un conjunto de tecnologías centradas en la digitalización de los procesos agrícolas. Se trata de equipos, software y sistemas que pueden mejorar el proceso de producción de principio a fin, haciéndolo más rápido, económico y sostenible.
En la práctica, esto significa una gigantesca combinación de tendencias y datos en tiempo real. La información extraída de este proceso sirve de guía para que los productores tomen decisiones más asertivas en sus empresas agrícolas. Además, está la automatización de funciones a gran escala a través del Internet de las Cosas y la Inteligencia Artificial.
En definitiva, cuando se habla de lo que es la agricultura 4.0, se trata de la tecnología digital como aliada para la realización de procesos agrícolas más productivos, autónomos y eficaces Desde el tratamiento del suelo hasta una cosecha de alta calidad.
Pero ¿por qué se llama Agricultura 4.0?
El nombre de Agricultura 4.0 deriva del término Industria 4.0, utilizado como sinónimo de la 4ª Revolución Industrial. Es la época en la que vivimos actualmente, en la que la tecnología nos ayuda a automatizar los procesos de producción de la forma más autónoma posible.
Al igual que las fábricas, el sector también ha pasado por otras etapas de evolución antes de llegar a la Agricultura 4.0. Véase más abajo:
Agricultura 1.0
La primera etapa destaca por la agricultura de subsistencia, en la que el agricultor cultiva para sobrevivir. Tiene una baja productividad y uso de energía debido al difícil acceso a la tecnología.
Agricultura 2.0
La agricultura 2.0 se desarrolla a partir de 1950. Esta fase representa el avance de la ciencia en el campo y la llegada de maquinaria para impulsar la producción. Este proceso se produjo en todo el mundo, también conocido como la Revolución Verde por los nuevos métodos de cultivo difundidos.
Agricultura 3.0
Entre 1990 y 2010, tenemos la aparición de la Agricultura 3.0 en la industria. Esta etapa se caracteriza por el inicio de la automatización y la recogida de datos para aumentar el rendimiento de los procesos agrícolas. Junto con esto, parte la preocupación por el medio ambiente debido a los daños sufridos en años anteriores por la expansión del agronegocio.
Agricultura 4.0
Por último, en la Agricultura 4.0, tenemos a la naturaleza no sólo como una preocupación, sino también como un requisito a tener en cuenta en los métodos de cultivo. Esta fase se produce después de 2010, y también incluye la creación de nuevas herramientas digitales para mejorar los resultados de la agricultura combinada con la sostenibilidad.
¿Cuáles son las tecnologías implicadas en la Agricultura 4.0?
Saber qué es la Agricultura 4.0 incluye también conocer sus herramientas más destacadas. El sector agrícola ha evolucionado tanto tecnológicamente que es prácticamente imposible mencionar todas las innovaciones que intervienen en la cadena de producción. Sin embargo, hay algunas tecnologías que destacan por contribuir significativamente durante el proceso de cultivo. Revisa los 4 principales:
1. Drones
Los drones son una de las innovaciones tecnológicas más famosas de los últimos años. Estos pequeños robots voladores se utilizan para visualizar el cultivo de forma panorámica. Algunos modelos ya funcionan de forma autónoma mediante una preconfiguración establecida.
Además, los drones agrícolas ya son capaces de identificar ataques de plagas, falta de riego, fallos en la plantación e incluso el seguimiento de animales.
2. Tractores autónomos
Mediante sensores tecnológicos e inteligencia artificial, los tractores ya pueden realizar sus funciones de forma autónoma en el cultivo. Este avance en la tecnología se refleja en los resultados de las cosechas y en la reducción de las pérdidas durante el proceso.
3. Software para la toma de decisiones
Los softwares de decisión son soluciones desarrolladas por Agtechs enfocadas a proporcionar un mayor asertividad en la producción. Estas herramientas analizan diferentes factores para ayudar al agricultor, como las finanzas, el clima, los fertilizantes y las plagas. BASF, por ejemplo, tiene xarvio, una solución digital que se centra en aumentar el rendimiento de sus campos.
4. Ventas electrónicas
Se habla mucho de los mercados para facilitar la compra de artículos que son más comunes en la rutina de la gente. Sin embargo, ya existen en el mercado plataformas específicas para el sector agroindustrial. BASF, por ejemplo, cuenta con el mercado Conecta para que proveedores y productores faciliten la venta de insumos agrícolas, que ya está disponible en países como Brasil y México.
¿Por qué es importante la Agricultura 4.0?
La agricultura 4.0 es fundamental para todos los productores rurales. Cada vez más, la agroindustria ha tenido que reinventarse para satisfacer de forma sostenible una demanda que no hace más que aumentar.
Según un estudio realizado por el Instituto de Recursos Mundiales (WRI), una organización medioambiental no gubernamental estadounidense, el planeta tendrá que ampliar su producción de alimentos en casi un 60% de aquí a 2050 para alimentar a 10.000 millones de personas.
Por lo tanto, la aplicación del concepto en la práctica no sólo optimizará la agricultura en el presente, sino que también dejará a los productores preparados para una tendencia que viene para quedarse. Entender qué es la agricultura 4.0, cuáles son sus implicaciones y su necesidad a largo plazo es estar preparado para el mañana.
Fuente: BASF