Mientras en Brasil y Estados Unidos creció 28% y 32%, en 10 años la producción de la oleaginosa en Argentina cayó casi 10%. Impacto en la molienda y el procesamiento.
A través de un informe técnico, la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina, advirtió que en los últimos 10 años la producción de soja en el país registró una caída del 9%, de 50 a 44 millones de toneladas.
“En el mismo período la producción de soja en Brasil pasó de 75 a 144 millones de toneladas mientras que en Estados Unidos creció de 91 a 199 millones, es decir que nuestros competidores crecieron y se quedaron con toda la riqueza que genera la demanda creciente” explicaron en la entidad agroindustrial y señalaron que “el estancamiento de la producción de soja argentina en la última década fue acompañada por un estancamiento en el volumen de soja procesada en el país”.
“En 2010 Argentina procesaba 36 millones de toneladas, mientras que una década después, para el 2022, se proyecta un volumen prácticamente igual. En el mismo período Estados Unidos aumentó su molienda en 14 millones de toneladas (32%) de 45 a 59 millones de toneladas mientras que Brasil lo hizo en 10 millones de toneladas (28%) de 37 a 48 millones de toneladas” detallaron desde CIARA y aclararon que “Argentina tuvo un muy leve aumento de su producción de harina de soja, sustentado por la importación temporaria de soja proveniente de Paraguay, lo que permitió que se mantenga el empleo nacional, las exportaciones de la industria de la soja y el ingreso de divisas”.
Además, anticiparon que “en los próximos años Estados Unidos incrementará de manera progresiva el procesamiento interno de soja para atender la creciente demanda interna de aceite de soja destinado a la elaboración de biodiésel” y describieron que “no es casual que este año la petrolera Chevron USA y Bunge North America anunciaran la creación de un joint venture con una inversión de 600 millones de dólares para producir biodiésel a base de aceite de soja, lo mismo hizo la petrolera Phillips 66 con Shell Rock Soy Processing y Marathon Petroleum con ADM”.
“Se está armando en Estados Unidos un auténtico conglomerado de megafábricas de biodiésel orientado a reducir de manera progresiva el uso relativo de gasoil de origen fósil” explicaron y señalaron que “por cada tonelada de aceite de soja que produzca Estados Unidos la contraparte de ese proceso será la obtención de 4 toneladas de harina de soja, la mayor parte de las cuales, seguramente, se destinarán al mercado externo para competir fuerte con las colocaciones realizadas por Argentina, país que es, por el momento, el mayor exportador mundial del producto”.
Finalmente, desde CIARA calcularon que “si la Argentina hubiese seguido el ritmo mundial de crecimiento de producción de soja, hoy estaríamos produciendo más de 70 millones de toneladas anuales y hubiésemos generado divisas adicionales en similar cuantía a la deuda externa que tenemos con el Fondo Monetario Internacional”. “Para llegar a 70 millones de toneladas de soja en pocos años debemos hacer 3 acciones: bajar la carga tributaria para producir más y generar más divisas e ingresos fiscales, sin intervenciones estatales en la exportación (menos retenciones, más exportaciones); regulaciones que permitan la captura de valor de la innovación de nuevas sojas con mejor genética y biotecnología (como tienen Brasil, Paraguay y Uruguay); y un plan de infraestructura exportadora (trenes y accesos a puertos incluyendo una pronta licitación para profundizar la Hidrovia)” reclamaron.