Mencionan una supuesta denuncia en Estados Unidos para investigar prácticas irregulares de Philip Morris International y de un estudio jurídico que involucrarían a funcionarios del gobierno y a diputados de la oposición dialoguista.
En un panorama político publicado durante el fin de semana en el diario La Nación, la periodista Maia Jastreblansky planteó los motivos del gobierno nacional para no avanzar por ahora con la reforma a los impuestos internos al tabaco.
“El gobierno se está tomando licencias en su agenda anticasta tanto por necesidades propias como por factores exógenos. Esto último, supuestamente, corrió para la reforma a los impuestos al tabaco que la Casa Rosada borró de un plumazo en la nueva versión de la Ley Bases. En el proyecto de enero había un artículo que cambiaba las reglas del sector para que todas las empresas tributaran lo mismo. Era un golpe artero al empresario Pablo Otero, dueño de Tabacalera Sarandí, que, a diferencia de compañías internacionales como Massalin Particulares y British American Tobacco, desde 2017 no paga el impuesto mínimo a los cigarrillos. Eso llevó a que un atado de una marca nacional sea mucho más barato. Y Sarandí vio crecer exponencialmente su participación en el mercado” describió la analista política y advirtió que “altas fuentes del gobierno comenzaron a señalar que lo que llevó a Milei a retirar los artículos del tabaco de la Ley de Bases fue una información sobre una supuesta denuncia, cuya autenticidad no está comprobada, radicada en la Securities and Exchange Commission de los Estados Unidos. Allí se habrían pedido investigar presuntas prácticas irregulares de Philip Morris International y de un estudio jurídico que involucrarían a funcionarios del Poder Ejecutivo y a dos diputados de la oposición dialoguista para cambiar la legislación argentina”.
“En el Congreso hay quienes dudan de la veracidad de ese documento. Como sea, la Casa Rosada prefirió sacrificar su reforma (dice que la impulsarán más adelante) hasta que bajen las olas. A esta altura, las operaciones cruzadas ponen un manto de sospecha muy incómodo para toda la política” agregó Jastreblansky.