Sembraron el nuevo Baguette 820 a la par del Baguette 802 -el más elegido del sudeste bonaerense- y quedó reflejado el aporte que hace la genética a los rendimientos.
Competir contra uno mismo es sin dudas el camino más difícil para la superación. Sin embargo, es el que eligió Nidera Semillas para mostrar en la práctica el aporte de su genética al constante crecimiento del trigo argentino.
“Nos permitimos desafiar los techos de rinde con Baguette 820”, dijo Otto Goedelmann, gerente de Nidera Semillas para la región sur, al contar la experiencia. ¿En qué consistió? En comparar la performance de esta variedad de ciclo largo lanzada en 2021 para planteos de alta productividad y tecnología en el segmento de mayor potencial de rendimiento, con su principal competidor, el Baguette 802, de quien es su reemplazo natural.
“Baguette 802 hoy ocupa más del 55% de la zona triguera por excelencia y es una variedad de ciclo largo con altísimo potencial de rinde en siembras tempranas en el sudeste bonaerense. El Baguette 820 aporta potencial de rinde y sanidad y supera al mejor testigo en ambientes de media y alta productividad, eso es lo que buscamos demostrar”, puntualizó Goedelmann.
La nueva variedad fue sembrada en franjas comparativas en cinco ubicaciones de la principal zona triguera y en manejos de alta tecnología, en secano. En Pieres, por ejemplo, fue sembrado el 26 de mayo a la par del Baguette 802 y, con el mismo manejo, logró superarlo en un 3,4% (con 8.720 Kg/ha). En otro lote de la misma localidad se repitió la experiencia con siembras del 5 de junio y esta vez el plus de rendimiento fue del 8,1% (8.000 kg/ha).
En Otamendi fue sembrado el 9 de junio y dio un 10,2% más (8.870 kg/ha) que el Baguette 802 que tuvo al lado. En Tandil se lo midió con una variedad de la competencia, de ciclo largo largo. Fueron sembrados el 28 de mayo y el rendimiento del Baguette 820 fue un 20,5% superior (6.025 kg/ha versus 5.000 kg/ha del competidor). En Balcarce, y con siembras del 10 de junio, fue medido con el Baguette 620. Esta vez, la variedad estrella logró un 28,5% más (8.100 Kg/ha).
En primera persona
Una de las experiencias tuvo como protagonista a Pablo Calviño, referente en la región y responsable técnico del Establecimiento San José, propiedad de Las Helenas S.A. En este campo, lindero a la ciudad de Barker, partido de Benito Juárez, el 2 de junio se sembró una parcela de Baguette 820 al lado de otro material de ciclo largo y alta performance. “Se manejaron con la misma tecnología y Baguette 820 mostró en las primeras etapas de elongación un perfil sanitario superior para las enfermedades de este año, tuvo bastante menos mancha amarilla y el rendimiento final fue de 5.230 kg/ha para la variedad de la competencia y 6.100 para el Baguette 820”, narró Calviño. El lote fue fertilizado con nitrógeno hasta llegar a un valor de 167 kilogramos de N y se hicieron dos aplicaciones de fungicidas: una en dos nudos, con una mezcla de estrobilurinas y triazoles, y otro en hoja bandera con una triple mezcla.
Fernando Pavlovich es otro protagonista de la experiencia. Cosechó el Baguette 820 en Otamendi y alcanzó en 8.870 kg/ha, en secano. Al lado, el 802 rondó los 7.300 Kg/ha. “Un poquito inesperado para el año, yo no pensé que íbamos a llegar a los 7.000 kilos por cómo se fue dando el año, empezamos a cosechar el 10 de diciembre, diez días antes que lo habitual. Sin embargo, los rindes están muy por encima de lo que pensábamos”, dijo y anunció que el Baguette 802 ahora compartirá escenario con el Baguette 820 y, para la cola de siembra, se suma el Baguette 620.
Sean Cameron es el propietario de los campos ubicados en Pieres, partido de Lobería. “Nidera venía difundiendo esta variedad que se considera un paso adelante en genética. Así que sembramos una pequeña parcela al lado del Baguette 802, que es la variedad que veníamos usando. Mismas condiciones, en un rastrojo de trébol blanco y con los mismos tratamientos. Los rendimientos estuvieron en torno a los 8.000 kg/ha y el Baguette 820 estuvo un poco mejor. Me gustó que es un trigo sano, mostró calidad, y es de menor porte que el 802, que es una buena señal para altos rendimientos, para que no se caiga…”, relató el productor.
El trébol blanco provee abundante nitrógeno, que luego Cameron complementa con 100 kg/ha de una mezcla de fósforo azufrado a la siembra y una aplicación de 150 kg/ha de fertilizante foliar. “Y los fungicidas son un mal necesario”, acotó.
“Para la campaña que viene hay que afrontar una inversión más alta y mayores niveles de riesgo. En lo que hace al manejo, las herramientas de ajustes tienen que ver con evaluar las curvas de respuesta económica de los nutrientes que estamos usando. Por suerte tenemos en esta zona muchísima experimentación”, dijo Cameron y alertó sobre el impacto que algunos recortes pueden tener en los rendimientos.
Por último, Federico Montes es encargado de producción de la firma Agrogenerales, con sede en Necochea, una empresa que, además de producir, multiplica semillas de Nidera.
Siembran en total unas 4.500 hectáreas en la región e “intentamos hacer la mitad de la superficie con cosecha fina”, aclaró Montes y especificó que el año pasado sembraron 800 hectáreas de trigo en una zona de alto potencial como es la ruta 88, entre Necochea y Mar del Plata. “Son campos que rinden de 6.000 a 8.000 kg/ha en los años buenos”, detalló.
Después de muchos años donde el Baguette 802 anduvo muy bien, hace dos años comenzaron a multiplicar Baguette 620, logrando rindes de 7000 kg/ha de promedio. “Y este año tuvimos la suerte de probar el Baguette 820 en un campo de General Alvarado”, puntualizó Montes para acotar: “sembramos 70 hectáreas y tuvimos un rinde de 8.062 kg/ha sobre un rastrojo de papa. El Baguette 820 estuvo al tope de todos los materiales”.
Fuente: Nidera