Profertil destaca el Día Nacional de la Conservación de los Suelos como una oportunidad para reflexionar sobre las prácticas necesarias para que la producción siga creciendo y sobre cómo hacerlo cuidando el medio ambiente.
Hoy, cuidar el suelo es más importante que nunca antes en la historia de la humanidad. En un mundo atravesado por la pandemia más global que se recuerde, es clave tomar conciencia de que solo el 3% de la superficie mundial es tierra cultivable, y que esa es la base para producir los alimentos que casi 8.000 millones de habitantes necesitan para seguir viviendo.
Por eso, este 7 de julio, Día Nacional de la Conservación de los Suelos, es una gran oportunidad para reflexionar sobre las prácticas que son necesarias para que la producción siga creciendo, pero también sobre cómo hacerlo cuidando el medio ambiente. En ese camino, Profertil, la principal empresa de nutrición de cultivos de la Argentina viene impulsando desde hace años los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS) que planteó la ONU para lograr un equilibrio entre el crecimiento de la economía y el cuidado del planeta.
El Día Nacional de la Conservación del Suelo fue establecido por decreto presidencial en 1963, en memoria del doctor Hugh Bennet, creador del Servicio de Conservación de Suelos de EE. UU., quien recorrió la Argentina y formó a pioneros locales en agricultura sostenible.
“Hoy, el camino que marcó ese pionero es seguido por miles de productores en la Argentina, que han posicionado al país como líder en agricultura de conservación, apoyados sobre todo en la práctica de la siembra directa, un sistema verdaderamente estratégico para el cuidado del suelo”, recordó Federico Veller, gerente general de Profertil.
Aapresid (la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa) ha sido clave en la difusión inicial de esta práctica y en la consolidación posterior de muchos conceptos vinculados al cuidado del suelo y la agricultura de conservación.
En los últimos años, la agricultura argentina está siendo cada vez más sustentable, con rotaciones de cultivos que son estratégicas para una correcta conservación de los suelos. Hoy, en la pampa húmeda hay solo 1,4 hectáreas de soja por cada hectárea de maíz y trigo. Hace solo 5 años esa relación era de casi 5 a 1 a favor de la soja.
Justamente, para el desarrollo de esos cultivos clave para la sustentabilidad y la protección del suelo, como el maíz y el trigo, la urea que elabora Profertil tiene un rol fundamental. “Se trata del principal fertilizante nitrogenado del país, justamente el que ambos cultivos requieren para producir más toneladas y de mejor calidad, que elaboramos con mucho orgullo en nuestra planta de Bahía Blanca”, indicó Veller.
La compañía lleva a cabo acciones permanentes para promover la conservación de los suelos. Por un lado, impulsa las Mejores Prácticas de Manejo (MPM), que incluyen determinar la dosis, fuente, momento y forma correcta de aplicar los fertilizantes. Y este año particularmente está acompañando el programa “Así son los suelos de mi país”, que brinda capacitaciones online a los docentes sobre la temática de la conservación.
Según cifras de la ONU, el 95% de los alimentos que consume la población mundial se producen directa o indirectamente en el suelo. Por eso, cuidarlo es central. El organismo estima que para el 2050 el mundo tendrá cerca de 10.000 millones de habitantes y la superficie cultivable no crecerá. Habrá que producir más y mejor sobre los mismos recursos.
“Todos debemos tomar conciencia del contexto en el que estamos y cuál es la responsabilidad que nos cabe, como personas y como empresas. Nosotros, desde Profertil, asumimos la de elaborar productos de manera sustentable para una agricultura que sea cada vez más productiva pero que también cuide el suelo y el medio ambiente, porque hoy solo por este camino se puede producir y crecer”, finalizó Veller.