El Tribuno Campo publicó una entrevista a la presidente de la Fundación Barbechando, Ángeles Naveyra, quien dio detalles del trabajo que la entidad lleva adelante y expuso las expectativas para el segundo semestre del año en materia legistativa agroindustrial en el Congreso de la Nación.
En el marco de la Exposición de la Sociedad Rural Salteña, la Fundación Barbechando realizó un presentación sobre la actividad que viene desarrollando desde el 2008, en el contexto de la Resolución 125, cuando productores y defensores de los valores republicanos, comenzaron a trabajar en el Congreso de la Nación para explicar y esclarecer las características del interior productivo, pasando del reclamo a la propuesta.
El Tribuno Campo entrevistó a Ángeles Naveyra, presidente de Barbechando, quien comentó sobre el trabajo que llevan adelante y planteó los escenarios futuros que avizoran desde la fundación.
En la presentación destacaron el caso del frente legislativo agropecuario en Brasil. ¿Cómo analizan este fenómeno desde Barbechando y qué mensaje dejan al respecto?
Después de tantos años de recorrer los pasillos del Congreso te das cuenta de que, si bien tu mensaje va permeando, no es suficiente. En 2020, durante la pandemia, en Fundación Barbechando empezamos a estudiar, entre otros, el ejemplo de Brasil. Veíamos el Brasil de hace 20 años comparado con el Brasil de ahora y nos preguntamos: ¿qué hicieron para estar hoy donde están en cuanto a producción, exportación, políticas públicas y mejora en la sociedad en general? La respuesta fue: políticas públicas.
Cuando ellos tomaron la decisión de armar el Frente Parlamentario Agropecuario, buscaron los legisladores que fueran o no del agro; de hecho, el 98 % del Frente Parlamentario no son agropecuarios, son urbanos, pero entendieron la importancia de tener una visión agroexportadora.
Ahí nos propusimos ver qué hicieron bien y traerlo a la Argentina. Así empezamos a soñar lo que hoy es el espacio interpartidario del agro: son legisladores nacionales, diputados y senadores de todos los partidos, a excepción del Frente de Izquierda. Ya contamos con 43 legisladores que nos acompañan a sentarnos a trabajar en la agenda del agro.
El primer semestre nos llevó puestos la Ley de Bases, todos nos dimos cuenta de que no había lugar para otra cosa. Ahora que la Ley ya está en vigencia, es el momento de empezar a trabajar en serio la agenda del agro y estos 43 legisladores nos dieron su compromiso de empezar a llevarla adelante en las instancias que se pueda.
Creemos que viene un segundo semestre muy activo, y ya se ha ido dando en las últimas semanas, para poder tener la presencia de la agenda del agro en el Congreso.
Más allá de estos 43 legisladores hay otros que también están comprometidos con la agenda. ¿Están identificados de manera tal que en la votaciones no se pierdan entre las decenas que levantan o no la mano para apoyar una ley?
Sí y lo más increíble es que, si analizás su extracción, hoy el 60 % no vienen del agro, son legisladores -que asumieron en diciembre en el espacio de la Libertad Avanza o están en su segundo año de mandato para los que renovaron- que empezaron a ver una agenda en la cual lo que le conviene a Argentina es transversal al partido político.
Hay legisladores que hoy son oposición, como Unión por la Patria, que se sientan con nosotros y dicen “sí, hay que sacar esta ley”. Tal es el caso, por ejemplo, de la ley de Buenas Prácticas Agrícolas (BPA). De esta manera se identifica a quienes están comprometidos con la agenda del agro, son quienes levantaron la mano y dijeron “yo quiero trabajar”. Además, nos invitaron a traer otros colegas a que acompañen esa ley y nos pidieron que no trabajemos como un frente sino como un espacio y por agenda.
¿Cree que es el tiempo para que se desempolven y traten leyes como las de BPA, fertilizantes, seguro multirriesgo, semillas, entre otras?
La respuesta te la doy con la realidad, el martes 20 de agosto la Comisión de Agricultura convocó a más de 8 instituciones para hablar de dos temas clave: la ley de biocombustibles y la de Régimen de Incentivos al Desarrollo Agroindustrial (RIDA). El presidente de la Comisión, el diputado Atilio Benedetti, está liderando junto a 18 legisladores más de todos los partidos políticos la ley RIDA.
En las próximas semanas se va a empezar a trabajar concretamente en las cuatro herramientas impositivas que buscan darle desarrollo a la agroindustria: amortización acelerada, evaluación de la hacienda de invernada equiparada a la cría para promover la ganadería, devolución de los saldos del IVA, y un certificado de crédito fiscal para desarrollar el uso de fertilizantes y semillas fiscalizadas.
El camino empezó, la agenda empezó. Lo que necesitamos es darle visibilidad para que la sociedad también nos acompañe en el tratamiento de las leyes. Porque al Congreso le importa mucho la agenda de la sociedad. Ahí es donde tenemos que ser inteligentes. Es el momento, a la agenda del agro hay que impulsarla en esta segunda etapa del año.
¿Cómo se compromete más a la gente del sector en este trabajo?
Lo primero que tenemos que entender es que, si decimos que Argentina es federal, nosotros tenemos que ser federales. La Ciudad de Buenos Aires es donde está el Congreso de la Nación, pero el verdadero federalismo está en el interior. Tenemos que trabajar desde ese lugar. Las provincias deben ser la base para los nodos, que es como llamamos a los lugares donde trabajamos en las provincias.
La Fundación necesita un nodo salteño tan fuerte que, cuando tengamos que ir a defender las leyes al Congreso de la Nación, nos demos media vuelta y tenga detrás la verdadera producción.
Para eso necesitamos compromiso. Y comprometerse no es solo ser candidato, es apoyar a instituciones como la Fundación Barbechando, que tienen la vocación de llevar la agenda del agro al Congreso de la Nación.
A mí me quedan dos años y medio como presidente y mi único objetivo es que la agenda del agro esté en cada uno de los escritorios de los legisladores de la Nación y de las provincias. Y te aseguro que, si tengo respuestas como la que tuve en Salta, lo vamos a conseguir. Comprometámonos que vale la pena.
Por: Belisario Saravia Olmos, El Tribuno Campo, editor