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INTA y PRV: hacia una ganadería más eficiente y sostenible

Las unidades del INTA en Sáenz Peña, Villa Ángela y Machagai investigan el PRV para optimizar su implementación en los establecimientos ganaderos.

Una de las técnicas de producción ganadera que más auge está teniendo en este último tiempo es el denominado Pastoreo Racional Voisin (PRV) que considera al sistema productivo un todo mayor a sus partes, la mayoría de las cuales tienen funciones relacionadas entre sí.

Este sistema propone el buen uso del forraje disponible, ya sean forrajeras o arbustivas, para la alimentación de los animales, siempre con el foco puesto en la protección del suelo y en generar abono a través de los animales que se concentran en un lugar y un tiempo específico. Justamente el tiempo y el espacio requerido son dos de las variables que se están empezando a investigar para obtener más y mejores beneficios en favor de la producción ganadera. En ese sentido, el INTA, a través de sus unidades en Sáenz Peña, Villa Ángela y Machagai, forma parte de un grupo de instituciones que están analizando esta forma de producción ganadera con el objetivo de obtener resultados que permitan a los productores implementarla de la mejor manera posible en base a los recursos disponibles en sus establecimientos.

El Ing. Agr. Silvio Pajor Flores, de la Agencia de Extensión Rural de INTA en Villa Ángela, uno de los principales impulsores de esta práctica en la región, manifestó: “EL PRV tiene que ver con el buen uso de los recursos naturales y se basa en cuatro leyes acuñadas por el bioquímico francés André Voisin a mediados del siglo XX: la ley del reposo, la ley de la ocupación, la ley del rendimiento máximo y la ley del requerimiento regular. Todas estas leyes, básicamente, tienen que ver con la ración diaria o la ración horaria que tengamos que dar a una especie rumiante. Es una estrategia muy flexible que se podría adaptar a los distintos ambientes, climas, especies y a todos los tamaños de explotación”

¿Qué es el PRV?

El PRV, consiste en dividir el campo en parcelas que varían en tamaño, donde cada día se traslada a los animales, para que las parcelas desocupadas puedan recuperar la calidad y a su vez lograr la implantación natural de forrajeras nativas como resultado de la regeneración del suelo y el descanso de la parcela. Este sistema utiliza alta carga animal por poco tiempo (1 a 4 días dependiendo de la temporada). Es un planteo en el que se elimina el uso de todo tipo de agroquímicos de síntesis: herbicidas, insecticidas, fertilizantes y se minimiza el uso de maquinaria pesada promoviendo la tecnología de procesos ecológicos y la menor dependencia de insumos externos al predio. También se elimina el uso de antibióticos en los animales como una estrategia para fomentar la aparición de escarabajos estercoleros. Todas las prácticas tienen como objetivo estimular la biocenosis o la vida en el suelo.

Aceptación de los productores

“En cuanto a la adopción en esta región; se han conformado distintos proyectos como ‘Sáenz Peña Regenera’ creado por el municipio de Presidencia Roque Sáenz Peña o el Club Amigos del PRV, un grupo de productores que motoriza este sistema junto algunos grupos de Cambio Rural. Gracias a todas estas iniciativas la adopción se va dando cada vez más en los productores y todos coinciden en que es una alternativa de producción de proteína de alto valor con mucho potencial”, resaltó el Ing. Pajor Flores.

Un sistema con mucho potencial para la región

Según un informe realizado por investigadores de la Estación Experimental Agropecuaria Sáenz Peña, que puede descargarse desde su repositorio público de información técnica. El pastoreo racional puede ser una herramienta de manejo para aportar a la regeneración del paisaje y el suelo a través de los cambios en la cobertura y la conservación de la materia orgánica, menor dependencia de insumos externos que al estar dolarizados elevan considerablemente el costo de producción, y las condiciones para el equilibrio del agroecosistema a través del descanso de los lotes que promueve la recuperación de los pastos.

El mayor stock de carbono, menor porcentaje de suelo desnudo, la mayor disponibilidad de forrajes y cobertura basal, junto a un mayor número de especies presentes en el PRV, indican que en el corto plazo se comienzan a ver cambios favorables para el suelo y la vegetación.

Los valores de kg/ha medidos en los dos últimos años, superiores al promedio regional; indican que el manejo influye directamente en los resultados productivos con buenas perspectivas.”

Si bien es un sistema que hace poco tiempo se está poniendo a prueba en la región, ya se pueden percibir en los productores un gran interés, prueba de ello fueron las más de 70 personas que concurrieron al Establecimiento Don Basilio a participar de la II Jornada de Ganadería Regenerativa del Sudoeste Chaqueño, que se celebró el pasado 20 de agosto en la localidad de Santa Sylvina.