NK Semillas lanzó tres nuevos híbridos de maíz, dos de ellos especialmente recomendados para la región NOA. Álvaro Saravia, del Área de Desarrollo de Producto de NK Semillas en el NOA, dio detalles sobre los mismos.
“Todo lo que hacemos rinde”, dicen en NK Semillas y bajo ese lema lanzaron tres híbridos de maíz “adaptables a todos los ambientes y fechas de siembra en ciclo intermedio”. Se trata del NK 842 Viptera3, el NK 870 Viptera3 y el NK 855 Viptera3, los que son presentados desde la compañía como “versátiles, y ciclo de madurez intermedio”, brindándole al productor más opciones al momento de planificar su campaña.
De cara a la nueva campaña, el semillero señala al NK 870 Viptera3 como un híbrido con alto potencial de rinde y estabilidad del porfolio para fechas de siembra temprana y tardía; con excelente perfil sanitario, sobresaliente comportamiento frente a quebrado del tallo y una excelente opción para fechas de siembra tardía, incorporando la tecnología Agrisure Viptera 3. Pero a este híbrido lo posicionan para zonas de Santiago del Estero hacía el sur, según comentó en el programa Claves del Campo (Radio Salta) Álvaro Saravia, del Área de Desarrollo de Producto de NK Semillas en el NOA.
“Es muy importante para nosotros posicionar los híbridos, a todos les hacemos una caracterización en el trabajo de desarrollo que llevamos adelante. Por eso, para el NOA los híbridos que posicionamos, por sus mejores condiciones, son el NK 855 Viptera3 y el NK 842 Viptera3, son materiales que se siembran en todo el país, lo que habla de la estabilidad que tienen”, comentó Saravia y agregó que “se trata de dos deudas que teníamos de NK con los productores, ya que veníamos del 505, un tropical, y del 126, un subtropical, ambos con muy buenas características, pero con los cuales nos quedábamos muy cortos en rendimiento y cómo construir el rendimiento”.
Saravia destacó que el 842 y el 855 son dos materiales templados de alto rinde, mayor que el del 126, y subrayó que el 842 tiene “una curva de densidad de respuesta al ambiente muy plana, que permite sembrar la semilla para el ambiente adecuado que hemos pensado y calculado bien, o ser un poco conservadores y bajar la densidad y, si el ambiente viene bien, tiene herramientas de compensación, con espigas muy prolijas en todas las plantas, asegurando un muy buen rinde”.
Los híbridos NK cuentan con biotecnología Agrisure Viptera3 que facilita el control contra lepidópteros. “Esta biotecnología ofrece protección del cultivo de maíz de las principales plagas, como el gusano cogollero, que pueden producir daños en estados iniciales o reproductivos del cultivo ocasionando importantes mermas en el rinde”, aseguraron desde NK Semillas, a lo que Álvaro Saravia agregó: “Viptera3 es la respuesta biotecnológica más sólida actualmente”.
Adicionalmente a los nuevos híbridos, la compañía recordó la importancia de contar con el Programa “Manejo Específico NK”, la herramienta digital de ambientación y recomendación de densidad por ambiente que le permite a los productores buscar el híbrido ideal para sus lotes y el manejo que le permita lograr los mejores rendimientos, logrando los ajustes adecuados para maximizar rendimientos en los distintos ambientes que hay dentro de un lote.
“NK consigue la confianza del productor con esta herramienta de recomendación variable, simple y gratuita para todos los usuarios de la marca. De esta manera, complementamos el comportamiento de todos los híbridos del porfolio con el buen servicio de una red de distribuidores comprometida, entrenada e identificados con la firma”, destacaron desde el semillero.
Una campaña difícil
Si bien el maíz está cosechándose y no se conocen los resultados finales, a nadie se le escapa que es una de las campañas más complicadas de los últimos tiempos.
Álvaro Saravia destacó, además de las dificultades que impuso el clima -con lluvias más que escasas, a destiempo y heterogéneas-, otras razones que influyeron negativamente en el ciclo productivo. Entre ellas, la falta de disponibilidad de semilla que atentó contra el área implantada; problemas agronómicos, como el quiebre de caña; la presión de malezas, cuya emergencia fue favorecida por la situación de sequía, -en este punto el técnico hizo hincapié en Borreria: “Una maleza que se está llevando mucha plata en aplicaciones”-.
La presión de insectos también fue parte de las dificultades de la campaña. “Hay mucha presión, sobre todo en los materiales que no controlan Spodoptera”, dijo Saravia, y agregó a las problemáticas la presencia de Dalbulus, la chicharrita que produce el Spiroplasma, a la que hay que enfrentar “con la elección de híbrido tolerantes y herramientas químicas”.
Sumado a lo que se mencionó, el corrimiento de las fechas de siembra aportó más complicaciones. “Las fechas de siembra de hace 10 o 12 años cambiaron. Los híbridos de maíz no están desplegando todo su potencial de rinde, pero sí de estabilidad. Por eso, trabajamos con híbridos que fueron seleccionados en estas condiciones climáticas, por lo que presentan muy buena estabilidad”, agregó el técnico haciendo referencia a los híbridos recién lanzados por el semillero.
A futuro, y en un marco de escases de semillas para la siembra de la próxima campaña, Saravia llevó tranquilidad concluyendo: “Ante situaciones complicadas de disponibilidad de semillas, NK prioriza sus clientes”.
Por: Belisario Saravia Olmos, edito de El Tribuno Campo
Fuente: El Tribuno Campo
