En una nueva sesión, el Consejo Directivo de Federación Agraria Argentina debatió la agenda agropecuaria, apuntando a que se escuche y dé soluciones a los productores.
En el marco del primer Consejo Directivo de Federación Agraria Argentina realizado de manera presencial, sus integrantes indicaron que “es necesario que tanto el Gobierno Nacional como la oposición entiendan la urgencia de recomenzar una agenda de trabajo en común, en el marco de una compleja situación económica y social, que necesita el esfuerzo de todos los sectores para salir adelante. Se deben abordar las distintas problemáticas, con políticas públicas que estimule la producción, como por ejemplo para las economías regionales, que son potencialmente las generadoras de empleo, pero que hoy están alicaídas y es necesario reactivarlas de forma urgente”.
En este sentido, los directores señalaron que, en esta segunda etapa del Gobierno Nacional, tal cual lo definiera el presidente “es fundamental para salir de la crisis en la que está en país inmerso, que el gobierno atienda lo que el sector necesita”.
Los federados remarcaron que se debe encontrar el acompañamiento para establecer en las retenciones un sistema progresivo hacia un mínimo no imponible, con doble deducción de ganancias en la compra de insumos y maquinarias, pensando en reducciones segmentadas paulatinas hasta llegar a cero, que responde a la demanda del universo productivo.
“Si el desafío real es poder alcanzar las aspiraciones de llegar a exportar 150 millones de toneladas de producción de granos, contar con la industrialización para llegar a los 100 mil millones de productos exportables, con la generación consecuente de 700 mil empleos. Debe haber necesariamente, un estímulo importante a la producción primaria”, agregaron.
En ese ámbito, y de cara a la nueva composición del Congreso Nacional, en pos de una Argentina que necesita un crecimiento sostenido económico y con generación de empleo, el Consejo Directivo consideró que “es necesario articular leyes que estimulen e impulsen las producciones de las economías regionales, desatendidas a lo largo de los distintos gobiernos. Hoy nuestros representados padecen una inviabilidad productiva como consecuencia de una alta inflación en dólares de los insumos que se necesitan para producir, teniendo la difícil tarea de vender los productos en mercado con una distorsión de precios desleal entre los que cobra el productor en chacra y lo que paga el consumidor en góndola. Esto, sumado a una economía deprimida, los arroja a una constante desaparición de muchos ellos; asimismo sucede que muchos de ellos no son sujetos de crédito, según los requisitos de las entidades bancarias. En otros casos padecen la falta de créditos acorde a las condiciones productivas. En síntesis, hay que generar condiciones para frenar la concentración y el desarraigo”.
Los directores apuntaron a que se encuentren en el nuevo equilibrio parlamentario tras las elecciones, los consensos para alcanzar aquellas políticas públicas que el sector viene demandando, tales como, entre otras, la actualización del monto de la Ley de Emergencia Agropecuaria, la reglamentación de la Ley de Reparación Histórica de la Agricultura Familiar N° 27118, y un verdadero Plan Ganadero Nacional a largo plazo.
Los federados auguraron que las promesas de campaña preelectoral de todos los partidos políticos conduzcan a concretar esas acciones, que no queden solo en promesas ni títulos de diarios, sino que se efectivicen con proyectos de ley en el Congreso y que sirvan para atender las demandas planteadas por los pequeños y medianos productores. También “que ese debate nos incluya para enriquecer algunos proyectos presentados que le han dado poco protagonismo al sector primario que representamos”.
Los integrantes del CDC afirmaron que la política sigue manteniendo una deuda histórica con el sector que representan. E indicaron que la agricultura familiar en un desarrollo socio económico nacional se debe transformar en la bandera que devuelva la vida a la ruralidad argentina, y así contribuir a poner en valor a los pueblos del interior productivo. En ese sentido, la entidad ratificó su disposición con todo el arco político para trabajar en proyectos de ley que conduzcan a ese rumbo.