El rinde promedio es de 48,5 quintales por hectárea, lo que significa un salto productivo de casi 65% respecto a la campaña anterior.
Con cerca del 30% de la superficie sembrada con sorgo granífero ya cosechada, el rinde promedio es de 48,5 quintales por hectárea, lo que significa un salto productivo de casi 65% respecto a la campaña anterior.
“En la zona núcleo se continúan registrando los mejores resultados, con un rinde promedio de 60 quintales por hectárea mientras que comenzó la cosecha en el NEA con un rinde promedio de 40 quintales por hectárea, resultados alentadores teniendo en cuenta el gran impacto que han tenido las adversidades sufridas en el maíz de la zona, en términos productivos” describieron especialistas de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires y concluyeron que “en este contexto, se mantiene la proyección de producción en 3,5 millones de toneladas”.