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El Gobierno redefine la estrategia de vacunación contra la aftosa

El Senasa oficializó cambios que reducen dosis y costos, con un ahorro estimado en 25 millones de dólares para el sector productivo.

El Gobierno nacional, a través de la Resolución 711/2025 del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), dispuso una modificación en el plan de vacunación contra la fiebre aftosa que entrará en vigencia en 2026.

La medida establece que, en la segunda campaña de ese año, dejarán de vacunarse vaquillonas, novillos, novillitos y toritos, categorías que ya cuentan con la inmunidad necesaria. Además, los establecimientos de engorde a corral quedarán exceptuados de la primera campaña. En conjunto, se reducirá la aplicación de 16 millones de dosis, lo que implica un ahorro estimado en 25 millones de dólares para los productores.

Ayer jueves la tarde, el ministro de Economía, Luis Caputo, adelantó la medida en la red social X y destacó que la decisión permitirá “bajar el costo de la producción en el campo” sin comprometer la sanidad ni el comercio internacional. “Esta iniciativa implicará un ahorro cercano a 14 millones de dosis y alrededor de 22 millones de dólares, además de 3 millones adicionales en feedlots”, señaló en sus redes sociales.

Por su parte, el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, subrayó que la resolución “evita la vacunación de ejemplares que ya recibieron varias dosis o que están próximos a faenarse”, lo que redunda en “una baja de costos para la ganadería y, en definitiva, para las familias argentinas”.

La Sociedad Rural Argentina, en un posteo en X, celebró la decisión y remarcó que “el anuncio de modificar el plan de vacunación contra la aftosa nos deja saber que podemos dialogar con el Gobierno y ese intercambio se traduce en medidas que mejoran la producción del campo y reducen sus costos”.

Desde Senasa, además, señalaron que la adecuación no pone en riesgo la sanidad animal, dado que luego de la segunda vacuna se garantiza inmunidad por un año. También destacaron que la estrategia se alinea con prácticas de países vecinos como Uruguay y Paraguay, y que la digitalización de los registros a través de la aplicación SIGSA App agilizará el sistema.