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Dos armas para combatir la Chicharrita

Syngenta obtuvo la aprobación de dos productos para el control de la plaga en el cultivo de maíz. estarán disponibles para la campaña 2024/25.

El pasado jueves, Syngenta informó que obtuvo el registro en Argentina de dos insecticidas para el control poblacional de Chicharrita del maíz (Dalbulus maidis), vector del patógeno Spiroplasma que causa el achaparramiento del maíz. Se trata de Verdavis de uso foliar y el Fortenza para tratamiento de semillas, son los primeros productos aprobados en el país para el manejo de esta plaga y estarían disponibles para la campaña 2024/25.

“La Chicharrita del maíz es una plaga conocida en el norte del país, que esta campaña se presentó con gran intensidad en esa región, y también se ha expandido en la zona centro. Su manejo resulta clave para garantizar una producción eficiente y sustentable, y evitar severos daños económicos”, comentó Nicolás Gennaro, director de Marketing de Protección de Cultivos de Syngenta para Latinoamérica Sur.

Luego, agregó que “estas nuevas herramientas de control se suman a las ya existentes dentro del concepto de manejo integrado de plagas, como la elección del híbrido, evitar el escalonamiento de siembras y control de las plantas de maíz durante el barbecho”. 

Verdavis, con tecnología Plinazolin, es el nuevo insecticida de aplicación foliar para el control de Chicharrita que debe aplicarse en estadios vegetativos muy tempranos (V2), cuando se observan los primeros adultos en los cogollos de las plántulas. Posee características muy favorables en cuanto a eficacia y control prolongado de un amplio espectro de plagas, además de otorgar acción protectora residual.

La tecnología Plinazolin, que se presentó a nivel global en Argentina en 2021, es un ingrediente activo que pertenece a una familia de insecticidas con solución eficaz en las estrategias de manejo de la resistencia. Ayuda a controlar más plagas, con menos aplicaciones, cuidando el medio ambiente y asegurando la productividad y calidad.

En el caso de Fortenza, se trata de un insecticida de amplio espectro que contiene el ingrediente activo Cyantraniliprole, y que se aplica como tratamiento de semillas previo a la siembra. Es capaz de prevenir el daño de los insectos desde el desarrollo temprano de los cultivos, mejorando su establecimiento y dando como resultado un mayor rendimiento.

“Una vez aplicado como tratamiento de semillas, el compuesto es rápidamente captado por las raíces y es transportado hacia la parte superior de la planta. De esta forma, protege los cultivos como resultado de una inhibición rápida de la alimentación y un efecto residual duradero”, explicó Luis López, gerente de Portfolio de Protección de Cultivos de Syngenta.

“Nuestra propuesta busca contribuir a la protección integral del cultivo. Fortenza, en combinación con Cruiser 60, producto ya establecido para tratamiento en maíz, protege el cultivo hasta la segunda hoja (V2). De ser necesario, el tratamiento puede luego complementarse con el uso de Verdavis hasta el estadio V8”, detalló.

Syngenta viene trabajando con ambas soluciones en Brasil y Paraguay, donde ya están registradas, por lo que cuenta con gran cantidad de información técnica sobre su funcionamiento.