Este problema sanitario se da entre el 60 % al 100 % de los rodeos bovinos y puede alcanzar una mortalidad del 20 %.
La diarrea neonatal (DN) es uno de los problemas sanitarios de mayor relevancia en los establecimientos ganaderos, generando pérdidas económicas importantes. En Argentina se ha reportado incidencias de diarreas entre el 60 % al 100 % en rebaños, con una mortalidad que puede alcanzar el 20 %.
El rotavirus bovino grupo A (RVA) se distribuye ampliamente en Argentina en los rodeos bovinos. Los genotipos G6P[11] y G10P[11] se encuentran generalmente en granjas lecheras y G6P[5] en granjas de carne. En la actualidad, solo hay un reporte de RVA caprino de la provincia de Buenos Aires informando la presencia del genotipo G8P[1] en cabritos sin diarrea.
El coronavirus bovino (CoVB) es la tercera causa de diarrea detectada en granjas lecheras (tambo) y de carne bovina, mientras que, en cabras, la información es escasa y, por lo tanto, no concluyente.
En el NOA
En la región noroeste de Argentina (NOA), hasta la fecha no se realizaron estudios epidemiológicos de ninguno de los patógenos involucrados en las DN en terneros y cabritos. La información provista por esta tesis sobre RVA y CoVB y su relación con los diferentes sistemas productivos y de manejo, permitirá diseñar diferentes estrategias, con el objetivo de mejorar y garantizar la supervivencia neonatal en una de las etapas más críticas de la cadena productiva.
El estudio se realizó en la región del Valle de Lerma de la provincia de Salta. En el estudio transversal se calculó las prevalencias de las DN, la infección por RVA y CoVB en terneros y cabritos y se describió la filogenia de los genotipos de RVA circulantes. A través de una encuesta se caracterizaron los sistemas productivos de los establecimientos.
En una segunda etapa, se realizó un estudio longitudinal en dos granjas lecheras y en un rodeo de cría en donde se calculó la incidencia de las DN, RVA y CoVB. También, se estudiaron establecimientos caprinos con el fin de identificar la presencia de RVA y coronavirus y su relación con la presentación de diarreas en los cabritos.
En el estudio transversal se evaluaron 39 granjas en total (19 granjas lecheras bovinas y 20 rodeos de cría), de donde se recolectaron 756 muestras de materia fecal. La prevalencia de la DN, RVA y CoVB en las granjas de bovinos fueron del 35,5 % (173/484), 9,5 % (46/484) y 0,4 % (2/284) respectivamente. En los rodeos de cría la prevalencia de las DN y RVA fueron del 19,61 % (61/311) y 6,75 % (21/311), respectivamente, sin resultados positivos para CoVB.
La diferencia entre las prevalencias de las DN entre tambos bovinos y de rodeo de cría fueron estadísticamente significativas (p ≤ 0,0001), pero no así las de RVA.
El genotipo G6(III)P[11] de RVA fue predominante en las granjas lecheras bovinas, mientras que en los establecimientos de rodeo de cría fue el G10(VI)P[11]. En este último sistema productivo, fue detectado por primera vez en Argentina la circulación del genotipo G15P[11] de RVA.
Factores de riesgo
Los factores de riesgo asociados significativamente a las DN en las granjas lecheras bovinas fueron el tamaño del rodeo, la edad del ternero, el tiempo de permanencia en el corral de parto, la infección por RVA y Cryptosporidium sp. Mientras que el sistema de crianza artificial y la edad del ternero se asociaron con la infección por RVA.
En los de rodeo de cría, el origen del agua, la frecuencia de vigilancia del rodeo y la edad de los terneros fueron factores de riesgo significativos en la ocurrencia de las diarreas neonatales. Por su parte, la infección por RVA solo se asoció con la capacitación del personal.
El estudio longitudinal en las granjas lecheras bovinas demostró que la crianza de terneros bajo un sistema colectivo aumentaba el riesgo de sufrir infecciones por RVA y CoVB. Los terneros con menos de 20 días de vida en el sistema individual tienen un riesgo bajo (OR = 0,09) de ser infectados con RVA, mientras que los terneros con la misma edad en el sistema colectivo tienen un mayor riesgo (OR = 4,9) de ser infectados.
El CoVB se asoció como factor de riesgo en los sistemas de crianza colectiva, donde los terneros con menos de 14 días de vida tuvieron un riesgo más alto (OR = 17,15) de estar infectados. En el sistema de crianza individual, los terneros de 24 y 48 horas de vida que tomaron el calostro directamente de la madre tuvieron títulos de anticuerpos IgG1 anti-RVA (GMT: 1782) y anti-CoVB (GMT: 1024) más bajos, que los títulos anti-RVA (GMT: 4096) y CoVB (GMT: 11585) de los terneros criados bajo un sistema colectivo y tomaron calostro a través de una botella.
En las granjas caprinas la prevalencia de DN en cabritos fue 3,4 % (2/59). El RVA se pudo detectar en el 8,5 % (5/59) de las muestras provenientes de animales sin síntomas de diarrea. Los estudios de tipificación y secuenciación confirmaron la presencia del genotipo G6(IV)P[?], siendo la primera vez que informa este genotipo en cabras de Argentina. No se observaron infecciones por coronavirus, sin embargo, sí se observaron anticuerpos circulantes en animales adultos y cabritos lo que sugiere que un agente viral antigénicamente relacionado con CoVB circula en las poblaciones bajo estudio.
Los resultados obtenidos en esta tesis son novedosos. Los hallazgos resultan de gran importancia para la región, la provincia y el país en relación con la epidemiología de las diarreas por RVA en bovinos de leche y cría bovina, destacándose la detección de una cepa de RVA G15P[11] en un rodeo de cría bovina con genotipo E12 de NSP4 y cepas de RVA G6 en cabritos.
Finalmente, el análisis de los factores riesgo y sus asociaciones nos permitirá generar recomendaciones de manejo para los productores de la zona para mejorar la sanidad de los animales.
Por: M. V. Dr. Emiliano Bertoni, director del Laboratorio de Diagnóstico Veterinario Centro Ganadero
Fuente: El Tribuno Campo