Creada por el Senasa en el ámbito de su Dirección Nacional de Sanidad Animal, la Comisión Nacional de Sanidad y Bienestar de bovinos y bubalinos, está integrada también organismos públicos y privados.
Con el objetivo de mantener actualizadas las normas sanitarias y facilitar su aplicación y cumplimiento, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) creó la Comisión Nacional de Sanidad Animal y Bienestar de los bovinos y bubalinos (Conab), integrada junto a representantes de otros organismos públicos y del sector privado.
La nueva Comisión, que funciona en el ámbito de la Dirección Nacional de Sanidad Animal (DNSA) del Senasa, tuvo su primera reunión, de manera remota con la asistencia de 25 representantes de los sectores público (como INTA, universidades y Conicet) y privado, en este último caso representantes del sector productivo, así como el de comercialización y el industrial y también representantes de los Colegios y Consejos de veterinarios privados.
En la apertura del encuentro, el presidente y el vicepresidente del Senasa, Carlos Paz y Carlos Milicevic, respectivamente, dieron la bienvenida y resaltaron la importancia de este tipo de ámbitos que permiten la puesta en común y el trabajo técnico en la sanidad y el bienestar de los animales.
Luego la directora nacional de Sanidad Animal del Senasa, Ximena Melón, destacó que desde las comisiones nacionales se procura “poder discutir técnicamente con los ámbitos involucrados, como productores, universidades, instituciones de investigación y colegios veterinarios, las acciones que favorezcan la consolidación de normas sanitarias y de bienestar animal de bovinos y bubalinos que sean aplicables y cumplibles”.
En el encuentro, los asistentes coincidieron en remarcar la importancia de la construcción de espacios de interacción público-privados para exponer inquietudes y preocupaciones de interés sanitario para el sector.
Durante esta primera reunión, el Senasa informó sobre la reciente auditoría de la Unión Europea (UE) realizada sobre residuos en carnes bovinas y contaminantes en animales vivos y productos animales, y sobre las propuestas de normas que se encuentran en consulta pública referidas al tema, considerando que la UE exige que los animales que proveen carne para exportar a ese destino no hayan recibido 17 β estradiol y sus ésteres en toda su vida.
Las autoridades del Senasa explicaron el contexto regional y las experiencias de las auditorías similares de la UE sobre residuos en países vecinos (Paraguay y Uruguay) y las medidas sanitarias tomadas por éstos, que fueron consideradas por el Senasa a la hora de proponer a la UE el esquema de garantías sobre el no uso de 17 β estradiol y sus ésteres en vacas y vaquillonas que se destinen a faena UE.
Asimismo, se explicó que teniendo en consideración la importancia de sostener el uso actual del 17 β estradiol como herramienta inocua para mejorar los índices reproductivos en Argentina y sobre la base de la información científico-técnica de que su uso en esas concentraciones y con fines zootécnicos no impacta en la salud de las personas, Argentina ofreció al bloque sostener su uso en nuestro país y al mismo tiempo garantizar su no utilización en los animales destinados a faena UE cumpliendo con la exigencia del bloque comunitario.
En este sentido se destacó que las normas que Senasa está proponiendo en la consulta pública no prohíben el uso de esta hormona en la República Argentina, sino que restringen su uso en aquellos animales que se destinen a faena UE y establecen los procedimientos de declaraciones juradas y controles para garantizar esta medida al bloque comprador.
De cara al futuro, los asistentes al encuentro de la Conab coincidieron en que resulta fundamental evaluar alternativas para la sustitución gradual de medicamentos prohibidos por los mercados compradores.
Tal lo establecido en la normativa, la Conab tendrá reuniones trimestrales con la posibilidad de generar encuentros extraordinarios en caso de que sea necesario.
Fuente: Senasa