Gracias a mejoras genéticas en el rodeo, el peso promedio de sacrificio aumentó 25% durante los últimos 30 años.
La Oficina de Estadísticas de Australia publicó recientemente estadísticas trimestrales sobre faena y producción de carne en las que se destaca un aumento del 25% en el peso de las carcasas en los últimos 30 años, debido a las mejoras genéticas introducidas a lo largo de los años.
“En el primer trimestre de 2024, la faena de bovinos disminuyó un 2% hasta alcanzar 1.811.300 cabezas, alcanzando un peso promedio de 315 kilos por res” consignaron especialistas de la Bolsa de Comercio de Rosario y añadieron que “en el caso de los machos, el promedio fue de 345 kilos mientras que, en hembras se alcanzó los 280 kilos registrando un aumento del 4% anual”.
Finalmente, los profesionales de la BCR destacaron que “esta cifra tiende a estar por encima del promedio de largo plazo, ya que se están pagando más las vaquillonas pesadas” y concluyeron que “la tendencia ascendente destaca los avances en la inversión genética producida en los últimos años”.