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Aplicaciones efectivas con foco en la calidad del agua

En el 19° Encuentro Nacional de monitoreo y control de plagas, malezas y enfermedades, ALZ-Agro ofreció una charla técnica sobre la importancia de la calidad de agua de aplicación.

ALZ-Agro participó del 19° Encuentro Nacional de monitoreo y control de plagas, malezas y enfermedades, organizado por Halcón, con una charla técnica sobre la importancia de la calidad de agua de aplicación, en el marco del curso “Penetración de la canopia para control de orugas defoliadoras en soja”.

Una serie de ensayos realizados en las provincias de La Pampa, Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Chaco, Formosa, Santiago del Estero, Salta y Tucumán, arrojan como resultado que el 94% de las aguas de aplicación necesitan corrección. La calidad es regular en el 89% de los casos y en el 5%, es mala. Sobre estos datos, el ingeniero agrónomo Guillermo Cubría expuso las estrategias del equipo de Desarrollo de ALZ-Agro.

La propuesta se centra en la utilización de Toke Plus, un potente secuestrante que asegura el control de las malezas, potencia el principio activo de los herbicidas, fungicidas y/o insecticidas. Este coadyuvante está recomendado para corregir la dureza y el pH del agua, y en su formulación, además del sulfato de amonio, contiene un humectante, un dispersante y una nueva molécula que incrementa el ingreso del activo al interior de las plantas. En mezclas con herbicidas mejora la eficacia a través de la corrección del agua de pulverización y el accionar en las paredes y membranas de las malezas.

Agricultura de precisión

Los avances significativos en materia de buenas prácticas agrícolas han llevado a desarrollar tecnologías de agricultura de precisión para conocer las necesidades de los cultivos, la aplicación más precisa de nutrientes y reducir la degradación del suelo y la contaminación del agua. En este sentido, ALZ-Agro ofrece bioestimulantes y fertilizantes entre los que se destaca Smartfoil, un bioestimulante líquido de origen vegetal, 100% orgánico, formulado para mitigar el impacto del estrés abiótico, recomendado para soja, maíz, trigo, cebada, girasol, colza, tabaco, caña de azúcar, entre otros cultivos. Contiene elementos orgánicos, aminoácidos y metabolitos de alta asimilación; promueve el vigor, reduce el aborto floral, aumenta la producción de semillas y asegura el rendimiento; colabora en la recuperación de síntomas de fitotoxicidad causados por la aplicación de agroquímicos; potencia la acción de los fungicidas y es apto para uso en mezcla con herbicidas e insecticidas. Esta formulación ya cubre más de 500 mil hectáreas plantadas y con excelentes resultados.