La Bolsa de Cereales publicó su Perspectiva Agroclimática Estacional en la que señala que el escenario climático 2021/2022 plantea grandes desafíos que deberán superarse haciendo un uso efectivo de la tecnología.
La Perspectiva Agroclimática Estacional de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, elaborada por el ingeniero agrónomo Eduardo M. Sierra, confirma la tendencia, para el escenario climático 2021/2022, del desarrollo de un episodio intenso de La Niña.
El informe explica que la interacción entre distintos factores climáticos apunta a generar situaciones regionales muy contrastantes, que afectarán el desarrollo de la cosecha gruesa 2021/2022 en forma diferencial de la siguiente manera:
– Bolivia, el oeste del Paraguay, el NOA, el este de Cuyo, el oeste de la región del Chaco y el noroeste de la región Pampeana, donde La Niña tiene acción positiva observarán precipitaciones normales a superiores a lo normal, pero que se activaran más tarde que lo usual, teniendo un desarrollo muy irregular y siendo acompañadas por tormentas severas, con vientos, granizo y aguaceros torrenciales, que causarán anegamientos y desbordes de ríos y arroyos, mientras el régimen térmico alternará fuertes calores, en los lapsos secos, con marcados descensos térmicos cuando se produzca el paso de frentes de tormenta.
– Una amplia extensión, incluyendo el sudoeste de la región Pampeana, el este de Córdoba, el oeste de Santa Fe, el sur de Santiago del Estero y las zonas vecinas, sufrirán la acción negativa combinada de La Niña, los vientos polares y el enfriamiento de la Costa Atlántica, sufriendo sequía y régimen térmico con grandes amplitudes, en el que se alternarán fuertes calores y cortos, pero marcados descensos térmicos.
– El este de la región Pampeana, el este de Santa Fe, la Mesopotamia, el este de la región del Chaco, la región Oriental del Paraguay, el Uruguay y el sur del Brasil, serán afectados por la acción negativa de La Niña, pero los vientos polares tendrán poco efecto, al mismo tiempo que su cercanía al Atlántico mejorará la entrada de humedad, haciendo que observen precipitaciones cercanas a lo normal, aunque muy irregulares, mientras que su régimen térmico observará contrastes menos marcados que las otras áreas.
“Puede concluirse que se está frente a un escenario climático muy contrastante geográficamente, y muy irregular en su marcha temporal, que plantea fuertes desafíos a la producción, que será necesario superar con un cuidadoso planteo agronómico y un uso racional de los recursos tecnológicos disponibles”, dice la perspectiva, y agrega que “la totalidad de los servicios meteorológicos de distintos países, consultados por el Servicio Meteorológico Nacional Australiano, indican la proximidad de un episodio de “La Niña”, si bien difieren en la intensidad del mismo”.