Con un 53% de avance en la molienda y más de 600.000 toneladas colocadas en el exterior, industriales y cañeros advierten sobre la caída del valor doméstico.
La producción de azúcar y alcohol en la zafra 2025 alcanzó niveles similares a los de 2024, con un avance superior al 53% de la caña disponible para moler. En la agroindustria, se destacó el perfil exportador de esta campaña, evidenciado por los contratos cerrados y los envíos efectivos, así como por los volúmenes de alcohol.
Sin embargo, los actores del mercado expresaron su preocupación por el bajo precio del producto en el mercado interno. Esta situación ha obligado a revisar los cálculos productivos, sobre todo, los cañeros de Tucumán y las demás provincias sucroalcoholeras. Incluso, llamó la atención que el valor local se encuentra por debajo del índice de Brasil.
En la última reunión de seguimiento de la campaña actual, con participación de directivos del Centro Azucarero Argentino (CAA) y el Instituto de Promoción del Azúcar y Alcohol de Tucumán (Ipaat), se determinaron el avance de la molienda, la elaboración de azúcar y alcohol y el plan de exportaciones.
Jorge Feijóo, presidente del CAA, destacó que, “tanto en molienda como producción de azúcar y alcohol, la evolución ha sido prácticamente igual a la del año pasado”, aunque marcó una diferencia: “Lo más significativo es que esta zafra comenzó con bastante menos stock inicial que la anterior”.
Por su parte, Bernabé Alzabé, vicepresidente del IPAAT, señaló que se han ajustado algunas estimaciones. Con ello, señaló: “la zafra en Tucumán y en los ingenios del norte tiene un avance del 53% con relación a la caña disponible para moler”. En esa línea, se confirmó una proyección de 640.000 y 650.000 metros cúbicos (m3) de alcohol, para lo que se destinarán 690.000 toneladas de azúcar.
Feijóo destacó que el sector adquirió un perfil exportador en esta campaña, con base en la apertura de mercados y “al trabajo de industriales y cañeros que lograron colocar más de 600.000 toneladas de azúcar en el mercado externo”.
“Con ese antecedente inmediato, el plan exportador ya tiene contratos por casi 550.000 toneladas, cuyo despacho se ejecuta desde junio pasado, también a un ritmo muy parecido al de la zafra anterior”, detalló el directivo.
“Las exportaciones por barco comenzaron con azúcar crudo y orgánico, mientras los blancos y refinados mantienen un ritmo sostenido: 20.000 toneladas mensuales a Chile y 6.000 a Uruguay, lo que totalizan 130.000 toneladas despachadas en los meses de junio y julio”, precisó seguidamente.
Comparativos
En la reunión, los participantes evaluaron los valores registrados hoy en los mercados externos e interno. Según expresaron, hubo variaciones en las plazas internacionales y los precios del crudo y del blanco experimentaron una leve recuperación. En el mercado internacional, la tonelada ronda en los U$S 370; mientras que en Argentina es de entre U$S 330 y U$S 340.
Sin embargo, se hizo hincapié en el precio bajo en el mercado interno, en un contexto marcado por el salto del dólar, entre otras variables. Además, se puso en la mesa otro dato inquietante: “Es significativamente menor al precio del azúcar en Brasil, el principal productor mundial. Es inédito e indica que el precio local debería recuperarse”, expresó Alzabé. La diferencia es de entre un 10% y 15% con respecto al precio de referencia de Brasil. Es inédito porque el mayor productor siempre estuvo un valor por debajo, teniendo en cuenta la producción superior, es decir, de más volumen.
Seguidamente, Feijóo fundamentó este escenario al decir que “sucede por una cuestión estacional de la zafra”. “Con el transcurso de la campaña, el precio se retrae y mejora en el semestre siguiente. El año pasado, por falta o deficiente información, ese proceso se retrasó, y fue en abril y mayo de este año que el precio de la bolsa tuvo recuperación; el desafío es recuperar precio cuanto antes. Cualquier postergación significa pérdidas injustificadas para el sector, ya que están dadas las condiciones para un mercado equilibrado”, finalizó.