Ampliarán la distribución de soluciones biológicas y comercializarán Stingray y Envigro, bioestimulantes a base de extracto del alga marina Ascophyllum nodosum.
Koppert Argentina, líder en protección y nutrición biológica de cultivos, anunció ante la prensa agropecuaria una nueva “alianza estratégica” con Acadian Plant Health, empresa canadiense líder mundial en tecnología y ciencia bioestimulante.
“Este acuerdo proporcionará a los productores argentinos acceso a un mayor número de soluciones biológicas con el mejor soporte técnico del equipo local, en línea con el compromiso de ambas compañías de brindar soluciones innovadoras a la industria agrícola” indicaron desde Koppert y añadieron que “nuestra experiencia y dedicación por la innovación se alinean perfectamente con la misión de Acadian de ofrecer soluciones biológicas de vanguardia, en beneficio de una agricultura más eficiente y sustentable”.
A partir de esta alianza, Koppert Argentina distribuirá productos de Acadian Plant Health como Stingray y Envigro, bioestimulantes a base de extracto del alga marina Ascophyllum nodosum, exclusiva de la zona intermareal del Atlánitco Norte en Halifax, Canadá.
“Stingray para cultivos extensivos y Envigro para cultivos intensivos y frutales, se destacan por tratarse de una mezcla compleja de compuestos bioactivos sinérgicos que contribuyen a un mayor desempeño fisiológico y nutricional permitiendo a los cultivos alcanzar su máximo potencial de rendimiento” señaló Fabián Díaz, gerente de Koppert Argentina.
Y Joaquín Sosa, director regional Cono Sur de Acadian Plant Health, detalló que “entre los beneficios de estos productos se pueden mencionar desarrollo radicular que promueve el alargamiento y ramificación de los pelos absorbentes, mejorando la actividad microbiana y la sanidad del suelo; la absorción de agua y de nutrientes por la presencia de agentes complejantes naturales que ayudan a la planta a utilizar los fertilizantes de forma más eficaz; un aumento del vigor general de la planta; mitigación de los efectos del estrés biótico y abiótico maximizando la eficiencia fotosintética, protegiendo el crecimiento de las plantas, y reduciendo el daño celular; estimulo a la planta para expresar su máximo potencial genético; y un incremento en la productividad y mejora la calidad del producto final, mejorando el calibre, uniformidad de frutos y vida post cosecha”.
