Investigadores del INTA Famaillá llevan adelante una experiencia para mejorar la oferta de micronutrientes en el cultivo del maní con el empleo de productos de aplicación foliar.
El cultivo en la provincia está creciendo en los últimos años, tanto en superficie cultivada como en expectativa productiva y comercial. Por esto, desde el INTA Famaillá se llevan adelante investigaciones para potenciar y eficientizar su desarrollo.
En este sentido, a los efectos de corregir posibles o eventuales deficiencias de los llamados micronutrientes en este cultivo, se considera a las fertilizaciones foliares como opciones validas porque permiten:
– Sobreponerse a limitaciones como condiciones de acidez o alcalinidad, que determinan la solubilidad de los nutrientes en el suelo (fosfato, sulfato, molibdatos, Fe, Mn, Cu, Zn).
– Superar el antagonismo entre determinados nutrientes.
– Corregir problemas en suelos heterogéneo con sectores de oferta limitada de nutrientes.
– Evitar las reacciones de fijación/absorción como en el caso del fósforo y el potasio.
– Ayudar a superar condiciones de estrés hídrico.
– Acelerar la eficiencia metabólica de las plantas en determinadas etapas fisiológicas, particularmente cuando se define el rendimiento en un período corto de tiempo.
Partiendo de esta propuesta, en la actual campaña 2023-2024, investigadores de la EEA Famaillá junto a extensionistas de la AER Aguilares del INTA y el apoyo de la empresa Serquim División Agro llevan adelante una experiencia para mejorar la oferta de micronutrientes en el cultivo con el empleo de productos de aplicación foliar en distintos momentos del ciclo y en la situación productiva en graneros, Tucumán. La aplicación de los elementos o nutrientes se realiza en forma secuenciada o simultánea, en distintas etapas y con el siguiente esquema:
– Establecimiento del cultivo: 15 días después de emergencia (DDE)
– Desarrollo e inicio de prefloración: 35 DDE
– Desarrollo reproductivo (llenado de cajas): 70 DDE
– Madurez a cosecha: 100 DDE
“Ante casos de tratamiento con respuesta positiva en esta primera campaña, con cosecha probable hacia fines de abril, los mismos se repetirán el próximo año en mayor escala y con más situaciones de análisis”, explicó el Ing. Roberto Sopena del INTA.
Los avances de esta primera experiencia en maní fueron expuestos en una jornada realizada en la localidad de Graneros con una gran concurrencia de productores del sur de Tucumán y norte de Catamarca. Allí, la empresa Prodeman disertó sobre el manejo del cultivo y su factibilidad económica. Mientras, Serquim e INTA Famaillá mostraron la experiencia en nutrición foliar.