Más de 7800 asistentes disfrutaron del XXXI Congreso de Aapresid, evento donde la sustentabilidad, innovación y tendencias del agro fueron los protagonistas.
Al cierre de la anterior edición de El Tribuno Campo contábamos que no había cerrado el XXXI Congreso de Aapresid, pero anticipábamos su éxito. Concluido el evento, que tuvo por lema “C, Elemento de vida”, podemos reafirmar que, una vez más, la principal actividad anual de la entidad es, sin dudas, una de las más convocantes e interesantes del sector agroindustrial.
Avala lo dicho una concurrencia de más de 7800 personas de todo el país y el mundo, entre los que se contaron destacados referentes y especialistas nacionales e internacionales del sector agropecuario, además de empresas y productores.
El carbono como eje
Si bien el congreso fue profuso en temáticas, debates y presentaciones, el lema “C, Elemento de vida” atravesó las tres jornadas en las que se desarrolló. Los expositores, productores, empresas y funcionarios que asistieron pusieron como eje a este elemento desde la óptica de cómo la actividad agropecuaria puede valerse del mismo para hacer un aporte sustentable al planeta, a la vez que cumple con su rol primordial de abastecer de alimentos y energía a un mundo cada vez más demandante.
Sin dudas, el carbono convocó e interesó al sector.
Hitos destacados
Repasando solo algunos de los hitos que marcaron el evento, Aapresid y Syngenta dieron a conocer los primeros resultados de un relevamiento que indica que las tierras agrícolas se encuentran a solo el 46 % de su capacidad de secuestro de carbono orgánico del suelo (COS). En este sentido, presentaron un mapa con información sumamente valiosa sobre el potencial de los suelos argentinos que podría llevar las reservas de COS de un 46 %, a un 56 % de su máxima capacidad de almacenamiento, lo cual supondría mitigar entre un 50 y un 64 % de las emisiones ligadas a la agricultura.
“Este proyecto que lideramos con Syngenta es muy importante, ya que nos permitirá saber dónde estamos parados en niveles de COS y a qué valores podemos aspirar en cada región. Pero, por otro lado, es clave para saber cómo ajustar estrategias para maximizar el secuestro en cada ambiente (nivel de intensificación, diversificación, nutrición, etc.)”, explicó Marcelo Torres, presidente de la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid).
A su vez agregó, “en ese camino, el aporte de los productores de Aapresid que vienen implementando prácticas tendientes al secuestro es fundamental ya que nos muestran el norte, ese ‘alcanzable’ al que podemos aspirar. Por último, el proyecto ayudará a generar herramientas para dar garantías de nuestro rol en la mitigación del cambio climático y posicionarnos a nivel global”.
También, se desarrolló el XXV Diálogo Internacional de Productores de Oleaginosas (IOPD, siglas en inglés) que reunió a los representantes de las asociaciones de productores de oleaginosas de los mayores países productores, representando productos como soja, girasol, canola y colza. Centrado en los desafíos que enfrenta la industria internacional, muchas de las discusiones pusieron foco en las políticas y regulaciones, el acceso al mercado y el futuro de la industria de oleaginosas.
En líneas generales, la agenda del IOPD combina paneles que tratan temas globales de relevancia para el sector oleaginoso, junto con segmentos dedicados a presentar las novedades de cada país miembro participante del diálogo. Las presentaciones de cada país (country presentations) incluyen noticias recientes, avances tecnológicos, y desafíos del sector para cada contexto nacional en particular.
Participaron de este encuentro: American Soybean Association (ASA); U.S. Canola Association y U.S. Soybean Export Council (Ussec) de Estados Unidos; Aapresid, en representación de nuestro país; la Asociación de Productores de Soja, Oleaginosas y Cereales (APS) y la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) de Paraguay; la Associação dos Produtores de Soja e Milho (Aprosoja) y la Associação dos Produtores de Soja e Milho de Mato Grosso (Aprosoja Mato Grosso) de Brasil. Así también, Australian Oilseeds Federation (AOF) de Australia, Canadian Canola Growers Association (CCGA) y Grain Farmers of Ontario (GFO) de Canadá, Fédération française des producteurs d’oléagineux et de protéagineux (FOP) de Francia, la Mesa Tecnológica de Oleaginosos (MTO) de Uruguay, National Farmers Union (NFU) de Reino Unido y Union zur Förderung von Oel- und Proteinpflanzen (UFOP) de Alemania.
Por otro lado, en el marco del panel: “Cooperación latinoamericana para una agricultura sustentable”, Caapas y el IICA, firmaron un acuerdo de cooperación técnica cuya finalidad es diseñar y ejecutar acciones que permita la coordinación, interacción y cooperación para el mejoramiento de la competitividad del sector agroalimentario continental por medio de agricultura sostenible y regenerativa, siembra directa, conservación de suelos y aquellas prácticas que contribuyan a incrementar rendimientos y al mismo tiempo la calidad de vida de los habitantes rurales.
También ganadería
El congreso también convocó a referentes del sector cárnico para debatir sobre las “Oportunidades y estrategias para la carne sudamericana”. Fernando Mattos del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca de Uruguay, Carlos Cherniak y Jorge Alberto Meza Robayo de FAO destacaron las fortalezas de la producción de carne y presentaron ideas innovadoras para potenciar al sector.
Mattos indicó que todos aquellos que desconocen del sector agropecuario deberían tener la oportunidad de conocerlo, debido a que se señala como uno de los principales productores de gases de efecto invernadero sin saber que también es el único sector que además de emitir, captura.
De cara a problemáticas ambientales como el incremento de la temperatura media, Mattos planteó que “el desafío en estos tiempos es demostrarle al mundo que somos capaces de llevar adelante procesos sostenibles siendo responsables como gestores de los recursos naturales”. Dijo que se señala al metano como uno de los principales gases contaminantes y por ello es necesario tomar el compromiso de reducir la emisión introduciendo prácticas más sustentables en la ganadería, como ser la protección ecológica del sector, tener en cuenta la salud del suelo, ajustando las cargas en los campos, utilizando pasturas mejoradas, planificando rotaciones, garantizando a su vez un aumento en la eficiencia de los sistemas productivos. A su vez indicó que aquellos productores que lleven adelante este tipo de manejo deben ser premiados.
Por otro lado, Jorge Meza Robayo hizo referencia a un reciente estudio de la FAO que explica cuál es el aporte de nutrientes de los alimentos de origen animal para poder tener una dieta saludable y explicó que, como otros sectores de la industria agroalimentaria, está utilizando técnicas y estrategias para mejorar los productos de consumo humano.
Los sistemas agroalimentarios son diferentes entre sí y es por esto que el balance de carbono de cada uno de ellos es distinto, lo cual determina heterogeneidad en los productos cárnicos. Debería utilizarse la “huella de carbono” como estrategia de mercado en la obtención de productos para marcar una diferencia para aquellos establecimientos utilizan prácticas que permitan ser más eficientes en términos energéticos y de carbono, propuso Meza Robayo.
Carlos B. Cherniak, expresó la importancia que tiene la FAO en el territorio argentino y en todos los países de Latinoamérica, la fuerte vinculación que establece este organismo para mantener la seguridad alimentaria y agregó que muchas veces es la antesala de temas que luego son abordados en la Organización Mundial de Comercio.
Indicó que gran parte de las barreras comerciales no son tal cual se plantean, y por ello es necesario defender nuestro modelo productivo más allá de las intenciones que tienen muchos, de que adoptemos modelos de otros países que, en definitiva, siguen los intereses de otros actores. Además, recordó cómo hace dos años atrás se intentó “demonizar” al sector ganadero y se fomentó la idea de reemplazar la proteína animal por las proteínas sintéticas con el apoyo de un conjunto de intereses económicos avalados por quienes impulsan este proyecto.
Por último, afirmó que la ganadería es uno de los sectores claves para cumplir con los compromisos de la seguridad alimentaria, principalmente en los países que se encuentran en desarrollo”.
El futuro de la agricultura en la visión de los líderes del sector fue uno de los paneles del evento.
Cómo ven los líderes el fututo de la agricultura
En el Congreso Aapresid el líder global de UPL Vikram Srhoff dijo que “La agricultura es parte de una solución correcta y natural para afrontar el cambio climático”
Durante el Congreso Aapresid, se realizó un panel integrado por el líder ejecutivo global de UPL Vikram Srhoff y el presidente de Aapresid Marcelo Torres y moderado por Héctor Huergo de Clarín.
La agricultura sustentable como parte de la seguridad alimentaria: “Todos los políticos de todos los países del mundo reconocen la importancia de los alimentos. La seguridad alimentaria lleva a la seguridad social”, comentó Vikram Srhoff.
También comentó que el cambio climático es un problema real, pero que la solución está en la agricultura e incluye a los productores. Si bien la agricultura es responsable del 30 % de los GEI (gases de efecto invernadero) estos gases se emiten en realidad para producir alimentos, lo que cambia la ecuación.
Además, dijo que: “la gente necesita comer al menos tres veces por día, durante los 365 días del año, pero ¿de dónde sale esta comida? El consumidor tiene que dejar de culpar a la agricultura y comenzar a ver a los productores como parte de una solución correcta y natural para afrontar el cambio climático.”
Cambio de perspectivas y comunicación: por su parte, Marcelo Torres remarcó que, para afrontar la demanda futura de alimentos, no tenemos más superficie para anexar a la agricultura. Sin embargo, con las mejoras genéticas y la tecnología que ya conocemos, como la no labranza, el siempre verde y la construcción de sistemas con microbiomas activos, podemos incrementar el potencial de producción. La limitante no es el conocimiento ni las tecnologías, sino que aún nos falta establecer mejores diálogos productivos. Debemos tener debates basados en ciencia y tecnología.
En este sentido, también reconoció la importancia de comunicar mejor lo que se hace bien. El desafío sigue siendo demostrar que nuestros sistemas productivos son eficientes y tiene una menor huella de C y, en unión con la agroindustria, consolidar canales de alimentos sustentables.
Hay que decodificar el mensaje al consumidor de manera que sea claro y atractivo para él. Para lograr esto, UPL se asoció con FIFA y tiene a importantes estrellas de fútbol como embajadores en comunicación.
También hablaron sobre el interés de los de las nuevas generaciones en el agro. En Argentina, Torres asegura que la bioeconomía y la tecnología digital son las áreas en donde los jóvenes se sienten más atraídos, y a su vez, son más hábiles para entenderlas y adaptarlas a los sistemas productivos.
Por último, Srhoff concluyó: “Argentina es líder en Siembra Directa y muchas otras innovaciones y es un país del que se debe hablar y celebrar más. Argentina está produciendo gran calidad de alimentos, cultivos y vinos y la gente lo debe saber. La producción de Argentina es estratégica en el mundo. Cada país está viendo lo que pasa en Argentina, porque si no producen y exportan el mundo enfrentaría muchos problemas. Así que como pueblo y agricultores asociados deben sentirse orgullosos de estar contribuyendo a un mundo más feliz y saludable”.
Fuente: El Tribuno Campo