FADA sostienes que 1 de cada 3 desocupados podría tener trabajo, calculado sólo sobre un aumento de granos, carnes de vaca y cerdo y biocombustibles.
¿Menos impuestos y más trabajo? Sí. Según David Miazzo, economista jefe de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA), la rueda del empleo agroindustrial genera actualmente 3,7 millones de empleos y propone que, con 4 cambios principales sumado a una implementación especial, nuestro país podría generar medio millón de nuevos empleos, lo que es equivalente a un tercio del total de desocupados en Argentina.
Pero eso no es todo, también apunta a un crecimiento general porque activaría al circuito de la economía y el bienestar que están tan afectados, es decir, provocaría un crecimiento en variados sectores del país, en sus regiones, en sus familias.
Las 4 claves a las que llegó FADA en su análisis son: Cero Retenciones, Cero Restricciones, Un Dólar y Reglas claras. Pero ¿cómo hacerlo sin desfinanciar al Estado? Desde FADA analizaron varios formatos y concluyeron en que las retenciones podrían eliminarse con la implementación de un “Certificado para pago de impuestos”.
“De manera progresiva, en cuatro años, parte de los ingresos por retenciones seguirían entrando al Estado y el que los paga podría contar con un instrumento que le permita utilizarlo para pagar impuestos en el futuro. Se amortigua el impacto fiscal y permite sacarle frenos al crecimiento. En uno de los ejemplos, estas modificaciones permitirían aumentar la producción de granos en un 56 %. Pero esto no es hablar sólo de granos, es un movimiento que significa enormes mejorías para las regiones y ciudades”, explica Miazzo.
Beneficiados
“Hay una idea de que las retenciones sólo afectan al campo, pero no es así, es un concepto errado que heredamos y es difícil visualizar estos temas en la vida cotidiana. ¿En qué me afectan?: en todo”, afirma Nicolle Pisani Claro, economista de FADA.
Luego, agrega: “Podemos verlo desde dos grandes aspectos: el primero, es que va más allá del que trabaja directamente en el agro, muchos de nuestros empleos están relacionados de manera indirecta y por eso lo que ocurre en el agro, nos impacta a todos. El segundo, porque las retenciones provocan que el país produzca menos y esto es: menos actividad económica, menos exportaciones, menos empleo, menos consumo, por ende, menos crecimiento para las familias”.
¿Por qué no crecemos?
“En parte, por la inestabilidad que provocan nuestras políticas económicas, que generan gastos y cargas tributarias excesivas, y eso termina en los problemas que tenemos, pero otra gran razón, es el enfoque anti-exportador que tiene Argentina”, comenta Miazzo.
“Hay una imagen súper reveladora, miremos el mapa del mundo, muy pocos países cobran retenciones. ¿Dónde está Argentina?: entre los pocos países que sí las cobra. Para analizarlo vemos cuánto es la recaudación total por impuestos del país y cuánto es la de derechos de exportación: en Argentina, y sólo en cuatro países más, del total de los impuestos del Estado, las retenciones son más del 10 %. Poniéndolo en un ejemplo básico: si el Estado, en todos sus impuestos recauda $ 100, las retenciones significan más de $ 10. Por eso, la carga es alta, porque esa proporción es alta. Y estamos entre los pocos cinco países en los que se da esa relación, junto con Costa de Marfil, Bielorrusia, Kazajstán y las Islas Salomón. En otros cinco significa menos del 10 % y en los demás es menos del 1 % o directamente no los cobran. Esto también indica que la mayoría de los países no aplica este impuesto de la manera que se hace en Argentina”, agrega Pisani Claro.
Pero hay otro dato más sorprendente aún: en los países donde no se aplican retenciones, se registra un gran crecimiento del PBI. En Argentina, donde sí hay retenciones, nuestro PBI por habitante ha crecido poco, sólo un 56 % en los últimos 30 años. En cambio, en países que facilitan producir, exportar y que crearon políticas más adecuadas, crecieron mucho más. Entre ellos, Uruguay creció 324 %, Paraguay 252 %, Canadá 149 % y Ucrania 241 %, entre muchos más. “Es revelador”, advierte Miazzo.
“Tenemos tan naturalizadas algunas medidas o políticas en nuestro país, que creemos que es igual en todos lados, pero lo cierto es que es algo casi único en el mundo y nos está causando un estancamiento. El hecho de tener retenciones y restricciones para exportar, problemas para producir más, que haya “distintos dólares” y reglas que no son claras, es un escenario que el mundo entero trata de evitar”, agrega Natalia Ariño, economista de FADA.
“Sabemos que toda propuesta es un desafío en el contexto de crisis que vivimos pero estamos convencidos de que es necesario para el crecimiento del país, por eso traemos esta iniciativa que incluye la propuesta para amortiguar el impacto fiscal: eliminar las retenciones, pero con la implementación de un esquema de certificados de crédito fiscal por una parte de lo que hoy son los derechos de exportación, durante cuatro años, con el fin de que el Estado no pierda toda esa caja de manera inmediata y el productor pueda usar una parte para pagar impuestos en el futuro”, remarcan desde FADA.
“Recordemos que, en la pizza que comemos hay miles de trabajadores, desde huerteros, molineros, operarios, hasta agrónomos, administrativos y comerciantes dentro de una enorme lista. ¿Por qué no iríamos por más? Si eso crece, no sólo crece el empleo, aporta crecimiento a ciudades y regiones. Se genera actividad económica, ingresan dólares por exportaciones, se moviliza el consumo, se genera más empleo, se amplía el acceso de la gente a productos y servicios… todas dinámicas que nos pueden empujar a salir adelante y apuntar al bienestar de las familias”, cierran los voceros de FADA.
Presentación
FADA presentará su propuesta hoy miércoles 7 de junio, a las 15 horas, en el Congreso de la Nación. La presentación podrá seguirse en: www.youtube.com/@diputados.argentina.