El pasado lunes se llevó a cabo la Asamblea General Ordinaria de la Sociedad Rural Salteña en la que se eligieron las nuevas autoridades de la entidad. Hasta el 2025 la entidad estará presidida por Joaquín Elizalde en la presidencia, Alfredo Figueroa en la vicepresidencia y los acompañará en la gestión Ana Lucía Torres como secretaria.
El Tribuno Campo conversó con el presidente saliente, Carlos Segón, quien realizó un balance de algunos aspectos de su gestión.
¿Qué balance hace de su presidencia que fue atravesada por la pandemia, por lo cual fue más extensa que lo normal?
En cuanto a la gestión, no le voy a echar la culpa ni a la pandemia ni a la guerra entre Rusia y Ucrania por lo que no se pudo hacer, porque ya está trillado ese tema. Lo que no se pudo hacer no es culpa de eso, sino porque a veces falta gestión o posibilidades por el entorno político y económico.
La verdad es que estoy bastante satisfecho, porque pudimos realizar algunas obras nuevas en el predio y reconstruir algo de la infraestructura que estaba en malas condiciones. Si bien quedaron cosas a medio camino, seguramente la nueva comisión las va a continuar, ya que por el sistema que tiene nuestra institución -que es un acuerdo de palabra, no de Estatuto-, en el que el vicepresidente sucede al presidente, permite dar cierta continuidad a la gestión.
Tuvimos cosas muy positivas, como la gran participación en cuanto a las consignaciones de hacienda y los remates nuevos que se fueron generando en la exposición. Eso, sumado a algunos aportes extraordinarios de socios nos permitió tener un respiro económico para llevar adelante las obras.
¿Cómo evaluaría la gestión gremial?
En este aspecto el balance no es tan positivo, poque es un tema en el que hay que remar en dulce de leche. A veces, la gestión gremial es complicada, porque hay cuestiones de la economía política nacional -como son las retenciones, el cepo a la exportación y el desdoblamiento cambiario-, que son difíciles de cambiar por más gestiones que uno haga. En estos temas es muy difícil tener resultados concretos.
Sí es muy positivo el accionar del Ateneo. Gente que salió del Ateneo ocupa hoy puestos importantes, en el gobierno provincial -en distintos cargos-, el municipal y en nuestra institución el actual vicepresidente, la nueva secretaria y el gerente son ex ateneístas. Si bien esto no es fruto de nuestra gestión, sí lo es de un trabajo que se empezó hace muchos años, en el que Eduardo Figueroa tuvo una gran participación, y hoy se está cosechando.
Desde lo institucional trabajamos mucho con el Ministerio de Educación en capacitaciones como manejo de tambo, a los que se sumarán este año manejo de feedlot. Son pequeños trabajos que van teniendo repercusión en una interacción público-privada.
Antes de asumir como presidente y también en la gestión tuvo una especial preocupación el ordenamiento territorial, ¿qué balance hace de este tema?
La verdad que es un sabor amargo en cuanto al tema ambiental y la revisión del ordenamiento territorial, ya que no termina de salir ni para bien ni para mal. Se sigue postergando y desde la Rural prácticamente lo damos como una batalla perdida, lamentablemente. Ni siquiera se autorizan hoy las habilitaciones en zona verde, con el pretexto que no salió la revisión, la que lleva ya 10 años.
Para mí hay una falta de decisión política de tomar el toro por las astas y, por lo menos sacar algo, positivo o negativo, para que los propietarios de los campos sepan a qué atenerse.
Además, hoy ya se habla de la certificación de productos de zonas libres de desforestación, algo que nos tiene muy preocupados. Aceptamos que es algo que se viene, pero creo que no hay que ser más papistas que el papa y debemos saber cuáles son las normas y reglas de juego que debemos imponer. Una cosa es hablar de deforestación ilegal y otra de campos habilitados legalmente, en los cuales, si uno puede certificar que tiene captación de carbono, no debería tener problemas para certificar ambientalmente las producciones.
Al inicio de su gestión se encaró una investigación sobre la mortandad de gatton panic en el este salteño. ¿Se pudo avanzar?
Casualmente acabo de recibir un informe técnico que llevó dos años de trabajo. Si bien no es definitivo, la gente del INTA de Tucumán y de la Obispo Colombres el documento contiene todos los análisis y trabajos que se han hecho, lo que permite avanzar en una segunda etapa en la cual se trabajará en dos o tres hipótesis. Aunque todavía no es definitivo, es un gran avance. Espero que en poco tiempo los productores cosechen el fruto de estas investigaciones.
¿Qué opina sobre el valor que se les da a las entidades como la Sociedad Rural?
A veces, las entidades como la nuestra no son valoradas como deberían. La Sociedad Rural no es una cooperativa que le da beneficio directo a los socios, sino que trabaja por el sector. Hay muchas cosas que se hacen para evitar que los productores se vean afectados, como reducir los impuestos que podrían ser demasiado altos. Pero, lamentablemente, a veces el sector no valora estas gestiones.
Por: Belisario Saravia Olmos, El Tribuno Campo, editor
Fuente: El Tribuno Campo
Las nuevas autoridades
La Asamblea General Ordinaria de la Sociedad Rural Salteña designó las autoridades que regirán la institución hasta el 2025 La nueva Comisión Directiva quedó conformada por:
Presidente: Joaquín Elizalde.
Vicepresidente: José Alfredo Figueroa.
Secretaria: Ana Lucía Torres.
Prosecretaria: Sofía Padilla.
Tesorero: Facundo Ramón Alvarado.
Protesorero: Juan Pablo Tezanos Pinto.
Vocales: Gastón Rodó Hombre, Eduardo César Navamuel, Javier Segura Malinar, Juan Manuel Saravia Laconi, Gustavo Federico Olmedo, Julio Argentino San Millán Méndez.
Vocales suplentes: Esteban Santiago Sánchez de Bustamante, Carla Fortuny Monico Cano, Juan Ignacio Lecuona de Prat, Leopoldo Federico Lee Figueroa.
Órgano de Fiscalización: Ignacio Manuel García del Río, José Javier López López, Francisco Inocencio Torino, Juan Martín Ficco.