“Los silobolsas son también útiles para el almacenamiento de reservas forrajeras como picado de sorgo, maíz o pasturas”, recuerdan desde Ipesa.
Frente a la menor oferta de granos como consecuencia de la sequía, Pablo Seniow, ejecutivo de la compañía plástica Ipesa Silos, recordó que “los silobolsas son también muy útiles para el almacenamiento de reservas forrajeras como picado de sorgo, maíz o pasturas” y añadió que “ante la demanda creciente de forrajes en un año muy difícil porque no hay pasturas ni verdeos, es importante asegurar la calidad de lo que se está embolsando”.
En declaraciones a El Tribuno Campo, el especialista insistió en que “la bolsa va a conservar la calidad que uno guarde y, entonces, hay que garantizar que el producto esté en las condiciones requeridas para el almacenaje” y aclaró que “para guardar granos lo importante es que tengan el menor daño y el menor contenido de humedad posible mientras que para guardar forrajes lo importante es que el contenido de humedad permita una buena fermentación y acidificación para la conservación durante todo el año”.
Ipesa abastece con más del 70 % de los silobolsas que se utilizan en la Argentina, pero también elabora productos para otros múltiples usos. “Producimos sachets, laminados y otros materiales de packaging”, describió Seniow y confirmó que “como parte de la expansión de la compañía, estamos ligados a la minería del litio con geomembranas para la reserva y almacenajes de agua”.
“En años de sequía y de tan pocas precipitaciones, esas geomembranas también sirven para la reserva de agua en muchos campos agrícolas y ganaderos”, concluyó el directivo de la compañía plástica.
Por: Gonzalo Teruel
