Están previstos en el Presupuesto 2023 y la mayor parte será para 10 proyectos. La inversión de la estatal minera irá a infraestructura vial, de gas y electricidad.
En el proyecto de Presupuesto provincial para 2023, que será tratado en la Legislatura durante la semana que inicia, se incluyó el aporte de $3.711 millones que prevé realizar la empresa Recursos Energéticos y Mineros de Salta (Remsa). La mayor parte de ese monto estará destinado a 11 obras públicas para desarrollar la minería y la provisión de gas y electricidad en diferentes localidades.
Remsa tiene dos fuentes de ingresos básicas: la concesión de áreas mineras y por los servicios de transporte de gas natural a la industria. Y en el corto plazo, cuando inicie la producción de los proyectos de litio de la Puna salteña, se agregarán los recursos que obtendrá la empresa estatal de un porcentaje por la venta de ese mineral.
Las obras previstas son el tendido de fibra óptica en la línea del gasoducto de la Puna para llevar internet a varios poblados y controlar el suministro de combustible por telemedición, con un presupuesto de $800 millones; un gasoducto que proveerá a La Viña y Guachipas, por $121 millones; la ampliación de la red de gas natural en La Silleta y Rosario de Lerma, por $46 millones; la ampliación de la red de gas en Metán, por $32 millones; obras para redes de gas domiciliario con una inversión de 80 millones; la ampliación del gasoducto de Anta, por $48 millones; el tendido de una línea eléctrica de media tensión entre La Poma y el paraje Rodeo, por $660 millones; la construcción de centrales híbridas de generación eléctrica con paneles solares por $253 millones; obras para crear un Nodo Logístico en la Puna, por $150 millones; la pavimentación y arreglo de la ruta provincial 27 por $500 millones; y la construcción de un camino alternativo a la ruta nacional 51 en Campo Quijano, por $555 millones.
“Tenemos el doble desafío de obtener los recursos y ejecutar las obras. Muchas veces lleva su tiempo especialmente las obras de gas, las redes de gas que estamos haciendo en Anta, La Viña y Guachipas. Estamos trabajando, también en redes de ampliación de gas en la Silleta, Rosario de Lerma y Metán. Y nos presentaron un proyecto de gas para La Caldera que empezamos a planificar”, detalló a El Tribuno el titular de Remsa, Alberto Castillo.
Sobre los ingresos, el administrador dio a conocer que por los servicios de transporte de gas, la empresa que dirige obtiene alrededor del 15% de sus recursos. En cuanto a lo que se cobra por las concesiones de las áreas mineras que pertenecen a la Provincia, dijo que no es solamente por la cesión de un yacimiento.
“Hay también un estudio integral del área, tanto jurídico como geológico sobre el cual Remsa cobra sus honorarios por esos servicios que representan importantes ingresos que luego se plasman en obras”, señaló.
“Cabe aclarar, que en ningún caso los ingresos de Remsa provienen de aportes directos del Gobierno de la Provincia. En nuestro caso son ingresos vinculados en su totalidad y provenientes de la actividad privada”, destacó Castillo.
El salto exponencial en los recursos que percibirá Remsa se dará a partir de 2024 y 2025 cuando arranque la producción de tres de los proyectos de litio que están en construcción en la Puna: Centenarios Ratones, a cargo de la compañía francesa Eramet y el grupo chino Tsingshan; el proyecto Mariana, de la empresa china Ganfeng Lithium, y Sal de Oro, de la surcoreana Posco.
La empresa estatal ingresa a esos emprendimientos bajo la figura “NSR”, siglas en inglés que significan retorno neto de fundición. Se trata de una regalía que se cobra de acuerdo al valor de salida del producto minero en boca de mina. Por ejemplo, en el caso del yacimiento Centenarios Ratones, que sería el primero en empezar su etapa productiva, Remsa percibirá un 5% de la venta de carbonato de litio por NSR. Desde la firma subsidiaria de ese proyecto, Eramine, estimaron que esa renta será de alrededor de 9 millones de dólares en el primer año.
Rutas
Una de las inversiones más significativas de Remsa es el arreglo de la ruta provincial 27, que une Olacapato con Salar de Pocitos y llega Tolar Grande. La pavimentación de la vía, que clave tanto para los habitantes de esa zona como para el desarrollo de la minería, comenzará en semanas.
También financiarán la construcción de una ruta pavimentada de 6 kilómetros que unirá la ruta nacional 51 con la ruta provincial 36, con la que se evitará el alto tránsito por el centro de Campo Quijano.
Por: Pablo Ferrer
Fuente: El Tribuno