Los cultivos de servicio colaboran con la conservación y la protección del suelo, BASF participa de la Red de Cultivos de Servicio, una iniciativa de la empresa y de Aapresid.
Se celebra este mes el Día Mundial del Suelo (5 de diciembre) designado por la Asamblea General de Naciones Unidas, conmemoración a través de cual se busca centrar la atención en la importancia de un suelo sano y fomentar la gestión sostenible de este recurso.
Los cultivos de servicio, aquellos que no tienen como fin ser cosechados, no sólo colaboran con la conservación del suelo, sino que también garantizan una amplia variedad de beneficios, como el control de malezas, ahorro en el consumo de agua, alternativas de siembra e implantación, la cobertura del suelo, la retención de carbono y nitrógeno en el suelo, entre otros.
El trabajo en conjunto entre los diferentes actores e instituciones permite conocer el comportamiento de las especies que pueden emplearse como cultivos de servicio o cobertura. En ese contexto, BASF participa de la Red de Cultivos de Servicio, una iniciativa de la empresa y de Aapresid que desde 2018 tiene como objetivo generar una comunidad que aporte datos a partir de experiencias compartidas destinadas a enriquecer la industria agrícola. “Ante el contexto de sequía, los cultivos de servicio son clave para mejorar la infiltración del agua para dar más capacidad de resiliencia al sistema. Anteriormente la agricultura ha descuidado el manejo del suelo y hoy estos cultivos son la gran herramienta para mejorar la salud y diversidad del suelo”, explica Gervasio Piñeiro, investigador de Fauba-Conicet y coordinador técnico de la Red de Cultivos de Servicio Aapresid-BASF.
Y agrega el Coordinador técnico de la Red de Cultivos de Servicio: “Aapresid, a través de su programa Sistema Chacras, propone que el productor sea protagonista del proceso de desarrollo y generación de información, y la inclusión de BASF es clave para poder llevar adelante el trabajo y poner foco en las interacciones y sinergias entre los cultivos de servicios y fitosanitarios que abren un abanico muy amplio para generar estrategias diversas para el manejo de malezas y plagas”. La Red de Cultivos de Servicios es un ejemplo de co-creación que le permite a BASF y sus aliados acercar investigación e innovación a los productores argentinos.
BASF implementa también internamente el uso de Cultivos de Servicio, donde en su Centro de Desarrollo Tecnológico en San Jerónimo (Santa Fe) ha aplicado esta práctica en los últimos de años en más de 20 Has. , apuntando a mejorar y conservar las características físicas, químicas y biológicas del suelo, como así también a reducir las aplicaciones de fitosanitarios para control de malezas.
A la vez, para seguir innovando en métodos para asegurar el cuidado del suelo, BASF avanza con el uso de Camas Biológicas para el tratamiento de residuos del uso de fitosanitarios. “Muy pocas empresas en el país poseen un sistema de biodigestores como el que contamos en nuestro Centro de Desarrollo Tecnológico en San Jerónimo. Es un método 100% ecológico de procesar los fitosanitarios residuales resultantes del trabajo en el centro de desarrollo, de forma tal que ningún residuo sólido ni líquido es descartado al ambiente, donde en el caso de los líquidos estos son tratados biológicamente sin que entren en contacto con la tierra”, destaca Marcelo Honczaryk, consultor en Ingeniería y Mantenimiento para la División de Soluciones para la Agricultura de BASF en Argentina.
Con estas iniciativas, BASF ratifica su compromiso de continuar acercando innovación a los agricultores argentinos para evolucionar hacia una agricultura cada vez más sustentable.