Carlos Achetoni, presidente de Federación Agraria Argentina, se refirió a los incendios en Corrientes, a las acusaciones del Gobierno nacional de que la Mesa de Enlace es la responsable sobre la suba de los precios y al ánimo de los productores.
Es un panorama desolador el de los incendios en Corrientes…
El impacto que genera una inundación es fuerte, pero la devastación que hace el incendio es más desoladora, no deja estructuras en pie, al animal que lo encierra lo mata y aquel que se salva queda sin ningún tipo de pastura.
Estas son situaciones que por ahí se trata de evidenciar cuando le cuentan todos los tiros en ganancia, en buena cosecha, y cuando se vienen todas estas tempestades, como dice la gente de campo, los productores se encuentran solos o con una asistencia insuficiente o muy simbólica que no hace a la solución del problema que tienen.
No hay debe y haber, siempre es el debe…
Claro. Este último año, tuvimos precios ascendentes de los commodities, pero el que más ascendió fue el precio de los insumos, que tuvo en una inflación de más del 100 % en dólares oficiales y sino estuvo a la par o con inflación respecto del dólar blue y, obviamente, ahí se torna imposible, inviable, producir por más precios que tengamos y, encima, soportar que pretendan desconectarnos del mundo. La verdad que es no tener idea de la situación que atraviesa el sector productivo.
Hasta dijeron que somos nosotros los que generamos los incendios. Esto molesta y duele mucho porque es un desconocimiento o una perversidad para formar una opinión equivocada de la situación.
¿Este tipo de inclemencias son más difíciles de soportar para los pequeños o medianos productores?
Sí, porque la escala les deja muy poca rentabilidad y esa rentabilidad va demandando que tenga cosecha certera todos los años; y el año que se yerra una cosecha el productor, principalmente el pequeño, sale del circuito producto del endeudamiento, que para es muy preocupante porque sabemos que hay un alto endeudamiento. Las carpetas de los pequeños productores no son bien consideradas en los bancos, por lo cual es difícil que le den financiamiento.
De esta manera se está perdiendo, sin querer o queriendo, el entramado rural del interior del país, que lo brinda el pequeño productor que vive donde produce. Hay que luchar fervientemente para que se sostenga este entramado y dejemos de concentrar a la gente en las grandes ciudades.
¿Creen desde la Mesa de Enlace que se puede avanzar en algún tipo de mecanismo que permita a los productores hacer frente a estas situaciones?
Sí, hay un trabajo coyuntural que hay que hacer para dar paliativos lo más rápido posible y un trabajo estructural -que lo venimos demandando, pero habrá que demandarlo más fuerte- que es generar un seguro integral o multirriesgo que le dé garantías al productor para esta alta inversión que hace a cielo abierto y que cuando suceden este tipo de siniestros se queda sin ninguna posibilidad de continuidad. Por eso hay que generar este tipo de herramientas, en todo el mundo se está trabajando con estos seguros para darle la holgura necesaria al productor.
En cuanto a la coyuntura, habrá que tratar que la Nación y las provincias dispongan de los fondos para poder asistir a esta situación y generar mecanismos que ayuden a destrabar esta situación. Por ejemplo, que el Senasa acciones mecanismos que faciliten el movimiento de hacienda.
El secretario de Comercio Interior de la Nación responsabilizó a la Mesa de Enlace de ser la culpable de la inflación, ¿qué opina de esta acusación?
Todas estas declaraciones son tan agresivas que uno nos las quiere contestar, pero hacer silencio es darles validez y hay que refutarlas fuertemente, porque no hay nada más equivocado. Nosotros no somos los que formamos los precios de góndola. Por ejemplo, en el caso del pollo la incidencia de los productores es del 20 % del valor de góndola; en el pan el 13 % es trigo.
O sea que poco y nada tenemos que ver con el precio final, y cualquier desconexión que nos intenten hacer, lo único que están haciendo es que quedemos en quebranto y que sea inviable, por lo menos para el pequeño y mediano productor, continuar en la actividad.
Esto no lo podemos permitir, es una falacia y si son tan buenos para corregir precios, que lástima que no llegaron a tiempo para controlar los precios de los insumos, que a muchos les costó más del doble poder producir.
¿Este tipo declaraciones se hacen para distraer del verdadero problema?, ¿para generar encono con el sector, ¿cuál cree que es el objetivo?
Tienen un poco de cada cosa y un fuerte componente ideológico. Lamentablemente han generado divisiones, grietas, antinomias entre el campo y la ciudad, y parece que esto les diera rédito, y la verdad que debemos ser un conjunto, una sinergia de los distintos sectores para dar producción, para generar valor agregado, para generar empleo y mayor ingresos de divisas, que es lo que debemos perseguir y tratar de bajar el costo que tiene el Estado para que haya un equilibrio fiscal sin mayor presión impositiva y haya más incentivo a la producción, que es la clave para poder salir adelante.
¿Hay ánimo de protesta en los productores?
Los ánimos vienen contenidos. Se venían aguantando los insumos caros y una situación abusiva entre retenciones e impuestos, pero la falta de cosecha por sequía, inundación, helada o granizo es la gota que rebalso el vaso, deja con poca paciencia al productor. Hay un estado de ánimo bastante exacerbado y los funcionarios deben escuchar.
Ojalá que haya diálogo fructífero, porque los ánimos del productor están muy caldeados y cualquier situación nos va a poner en límite de una acción gremial.
El 5 de marzo vamos a tener una jornada en Alcorta en la que vamos a confluir con las otras entidades, con los sectores de todos los productores del país y otros sectores que entiendan que debemos buscar un plan integral que permita salir no solo de la situación sino potenciar a la Argentina como corresponde.
Por: Belisario Saravia Olmos
Fuente: El Tribuno Campo